"Ante Dios y con la conciencia totalmente clara puedo declarar categóricamente que las acusaciones presentadas contra mí son falsas", dijo el reverendo mexicano Marcial Maciel. |
CIUDAD DEL VATICANO.- El Vaticano informó que este viernes que le pidió al fundador de la orden de los Legionarios de Cristo que renuncie a celebrar misas y viva su vida dedicado a la oración y el arrepentimiento, luego de supuestamente haber abusado sexualmente de seminaristas.
En una declaración oficial, el Vaticano dijo que el Papa Benedicto XVI aprobó las sanciones contra el reverendo mexicano Marcial Maciel, en el primer caso de acción disciplinaria por abuso sexual que ha manejado desde que asumió el año pasado.
Los Legionarios señalaron en un comunicado que su fundador, si bien se declara inocente, acepta la decisión del Vaticano con "fe, total calma y su conciencia tranquila".
Maciel es uno de los más reconocidos funcionarios católicos que el Vaticano ha disciplinado por su supuesta participación en abuso sexual de menores. El caso es de especial importancia, al ser Maciel alguien que gozaba del afecto del Papa Juan Pablo II.
El fundador del movimiento religioso renunció en enero de 2005 a la dirección general de los Legionarios, según se explicó en ese momento "por razones de edad y movido por su deseo de ver florecer en vida a la congregación bajo la dirección de su sucesor".
La decisión de Benedicto XVI de aprobar las sanciones señala que está condicionado al legado de Juan Pablo II cuando se trata de enfrentar a los que calificó como la "suciedad" en la iglesia, lo cual se ha interpretado como una crítica contra el abuso sexual.
Desde 1998, la Congregación para la Doctrina de la Fe, encabezada por Benedicto XVI antes de ser Papa,
ha investigado las acusaciones de ex seminaristas que dijeron ser sometidos a abuso sexual por parte de Maciel hace décadas.
Nueve ex seminaristas acusaron a Maciel de abusar de ellos cuando eran niños o adolescentes en las décadas de 1940 al 60. Posteriormente, lo han denunciado otras víctimas.
En la declaración, no se precisa si se determinó la veracidad de los cargos contra Maciel, pero se señala que debido a su edad, 86 años, se decidió no emprender un juicio eclesiástico en su contra.
En cambio, indica que la Congregación para la Doctrina de la Fe invitó al sacerdote a vivir una vida dedicada a la oración y al arrepentimiento, renunciando al ministerio público.
Maciel y los Legionarios han rechazado enérgicamente las denuncias. "Ante Dios y con la conciencia totalmente clara puedo declarar categóricamente que las acusaciones presentadas contra mí son falsas", dijo Maciel en un comunicado en el 2002. "Jamás participé de la clase de conducta repugnante de la que estos hombres me acusan".
Consultado el jueves acerca de las posibles medidas del Vaticano contra Maciel, el vocero de los Legionarios en Estados Unidos, Jay Dunlap, dijo en un correo electrónico: "No tenemos nada que decir. No sabemos nada sobre esto".
El caso contra Maciel es seguido de cerca por víctimas de abusos sexuales por clérigos porque Maciel en particular, y los Legionarios en general, gozaron de los favores del Papa Juan Pablo II.
El difunto Papa, en ocasión del 60 aniversario de la ordenación de Maciel en el 2004, elogió su "intenso, generoso y fructífero" ministerio. Maciel fundó la orden en México en 1941.