ASUNCIÓN.- El Presidente de Paraguay, Fernando Lugo, quien el lunes reconoció ser padre de un niño de dos años que fue concebido cuando aún era obispo, anunció que en 2013 "cuando me vaya del cargo, volveré a la Iglesia porque nunca la abandoné, sólo dejé el ministerio del sacerdocio".
"Felizmente, la Iglesia Católica es muy pluralista y tiene muchos lugares en donde yo podré trabajar cuando el 16 de agosto de 2013 deje la Presidencia", expresó durante una entrevista con el canal 11 de televisión.
Lugo, de 57 años, ejerció el obispado en el norteño departamento de San Pedro desde 1994 hasta 2004 cuando fue jubilado por el entonces Papa Juan Pablo II. En diciembre de 2006 renunció al sacerdocio, pero sólo el 31 de julio de 2008 el Papa Benedicto XVI lo devolvió al estado laical.
Durante la entrevista cumplió su promesa de no hablar acerca de su relación amorosa con Viviana Carrillo, de 26 años, y del hijo de ambos, Guillermo Armindo.
El periodista Humberto Rubín, conductor del programa, pidió al Jefe de Estado que se convierta en un buen papá a lo que Lugo no contestó verbalmente, pero asintió con movimientos de la cabeza.
"No tengo el pensamiento puesto en la reelección. Yo gobierno día a día y no tengo tiempo para pensar en qué pasará en 2013. Los problemas del país son muchos. La población no percibe los cambios como desearía, pero estamos trabajando", expresó Lugo.
Agregó que el 20 de abril en el primer aniversario de la victoria electoral que desalojó del poder luego de 61 años al Partido Colorado, "haré algunas modificaciones en cuatro de los diez ministerios", sin aclarar en cuáles.