BUENOS AIRES.- El jefe de gabinete, Aníbal Fernández, afirmó este sábado que el gobierno argentino apeló los fallos que frenan los decretos del Ejecutivo para destituir al presidente del Banco Central, Martín Redrado, y habilitar el pago de la deuda soberana con reservas.
"Las presentaciones ya fueron hechas y comienzan a correr los plazos, la Cámara de Apelaciones entendió que el tema no admite demora" y recepcionó los escritos pese a la feria judicial del fin de semana, afirmó Fernández al canal de televisión C5N.
La jueza federal María José Sarmiento, que frenó los decretos de Kirchner, se había negado a recibir las apelaciones en su domicilio durante el fin de semana y había denunciado presiones del gobierno mediante la presencia de un móvil policial en las puertas de su casa.
"Tendrán que esperar hasta el lunes cuando abra mi despacho, no tengo jurisdicción para recibir un escrito en mi domicilio", había dicho Sarmiento a la televisión.
Pero el gobierno esta apremiado por zanjar la cuestión cuanto antes para evitar un mayor desgaste político y solicitó la excepción a la feria.
Pese a ello el Ejecutivo deberá esperar ahora la decisión de la jueza que puede aceptar o rechazar la apelación, en cuyo caso el tema puede llegar hasta la Corte Suprema.
La pelea de fondo es la potestad del Ejecutivo para el uso de las reservas del Tesoro, valuadas en 48.156 millones de dólares a diciembre de 2009, más del doble de lo que había en las arcas del Banco Central cuando Redrado asumió en 2004.
El titular del Banco Central tiene mandato hasta septiembre de este año y sólo puede ser removido bajo consulta parlamentaria, según la Carta Orgánica de la entidad, requisito que el Ejecutivo obvió.
Ello dio paso a un recurso de amparo presentado por Redrado para reasumir en su cargo, lo que finalmente obtuvo el viernes.
El gobierno argentino debe afrontar en 2010 vencimientos de deuda por 13.000 millones de dólares, parte de los cuales pretendía afrontar mediante la conformación del llamado Fondo del Bicentenario con 6.569 millones de dólares de las reservas del Banco Central, medida que fue suspendida por la justicia.