ROMA.- Quince inmigrantes de origen africano y confesión musulmana fueron detenidos este jueves a su llegada a Sicilia, en el sur de Italia, acusados de haber arrojado al mar a 12 cristianos después de una pelea en la barcaza en la que viajaban.
Las víctimas eran "de confesión cristiana a diferencia de sus agresores de confesión musulmana", indicó la Policía de Palermo.
Según la institución, las 15 personas detenidas son acusadas "de homicidio múltiple agravado por odio religioso".
Los sobrevivientes contaron que zarparon el martes de las costas libias en una lancha neumática que transportaba a un centenar de pasajeros.
"Durante la travesía, los nigerianos y los ghaneses, minoría en la lancha, fueron amenazados de ser arrojados al mar por unos quince pasajeros", precisa la policía.
La pelea se armó por "la fe cristiana de las víctimas, ya que los agresores eran musulmanes", explica la nota.
"De las amenazas pasaron a los hechos y arrojaron a doce personas al mar, todas de Nigeria y Ghana", recalca el comunicado, añadiendo que "otros pasajeros se pudieron salvar sólo porque crearon una cadena humana para impedir que los ahogaran", según los conmovedores testimonios dados a la policía por sobrevivientes "en lágrimas".
Fuentes judiciales indicaron que se trata de testimonios "creíbles" y algunos de ellos tomaron fotos de lo ocurrido.
La policía envió un informe al tribunal de Palermo que tiene 48 horas para confirmar las detenciones.
Se trata de un hecho inédito en Italia, ya que en el pasado han sido detenidos traficantes de seres humanos por maltratar a los pasajeros o abandonarlos en el mar, pero hasta ahora nunca habían detenido a inmigrantes por un delito ocasionado por "odio religioso".
