MONTREAL.- La policía canadiense investiga la muerte de cinco personas, dos adultos y tres niños, cuyos restos fueron encontrados durante la noche del martes en una región rural del centro del país.
Alertados por un familiar, los gendarmes se presentaron en horas de la madrugada del miércoles en el pueblo de Tisdale, en la provincia de Saskatchewan.
"Los policías entraron en una residencia donde encontraron cuatro personas fallecidas: una mujer y tres niños de menos de 9 años", explicó la gendarmería real (GRC por sus siglas en francés) en un comunicado en el que apuntaba que "las muertes tienen un origen sospechoso".
Los investigadores señalaron rápidamente a un potencial responsable —del que no precisaron la identidad— que se habría suicidado después de cometer el delito.
Los gendarmes se presentaron entonces a una residencia de Prince Albert, a 135 kilómetros de Tisdale, y "encontraron el cuerpo sin vida del sospechoso, así como a un bebé de seis meses" sano y salvo.
La GRC tiene prevista una rueda de prensa para comunicar sus conclusiones sobre la investigación.
