LOS ANGELES.- La actriz y cantante Madonna pudo haber dado giros y piruetas de una jovencita en la entrega de los premios Grammy, pero su cuerpo ciertamente resintió los estragos posteriormente.
Después de su gran actuación, Madonna fue sometida a una operación para curarle una hernia en el Centrok Médico Cedars-Sinai, informó el diario New York Post.
La cantante, de 47 años, estaba "pálida y sin apetito" después de la operación. La última vez que estuvo en el Centro Kabbalah de Los Angeles el 10 de febrero, Madonna no comió o dirigió la oración tras la cena que acostumbra hacer cuando se encuentra en ese lugar.
Su esposo, el director cinematográfico Guy Ritchie, tampoco estuvo presente, indicó el Post.
"Lo que se haya comentado en el New York Post lo estamos confirmando", señaló el jueves la asistente del publicista de Madonna, Briele Douglass.
El año pasado, Madonna sufrió en Londres un accidente al caerse de un caballo que le provocó una fractura de clavícula y de tres costillas.
