La historia de Marino llegó a formar parte de los referentes populares de nuestro país, inspirando nuevas creaciones hasta hoy.
El MercurioEscuche al siniestro Doctor Mortis (02'01'')
SANTIAGO.- El Doctor Mortis, siniestro personaje que se transformó en el emblema de los radioteatros en nuestro país, ha quedado huérfano. Esta mañana en Argentina, donde residía, falleció a los 87 años Juan Marino, autor, guionista y voz de las célebres historias.
Marino falleció a causa de un paro cardíaco, tras 15 años de convivir con un cáncer al intestino.
La voz más tenebrosa de la radio chilena había nacido en Punta Arenas el 7 de septiembre de 1920.
Su deceso llega justo en momentos en que el personaje y su radioteatro estaban siendo revividos con gran éxito por la Compañía Teatrofónico, que desde el Centro Mori emitió a través de Radio Concierto las mismas historias que escribiera Juan Marino, décadas atrás.
Las presentaciones, que se extendieron hasta el 2 de junio, las noches de viernes y sábado, fueron un éxito tanto de público como de crítica.
Sin embargo, ésta fue sólo la última incursión del clásico Doctor Mortis fuera de su espectro radial original. Ya en la década del 60 había llegado al cómic a través de editorial Zig-Zag, primera ocasión en que el personaje adquirió una figura reconocible, ya que Marino había querido mantener la posibilidad de que cada auditor se formara su propia imagen. Por lo mismo, se negaba en forma permanente a dar entrevistas.
Al teatro llegaría por última vez en 2005, de la mano de la misma compañía que este año lo llevó de vuelta a la radio. Se trató de "Doctor Mortis", una obra callejera en la que actuaban, entre otros, Macarena Teke y Héctor Morales.
Legendario
Siempre con buenas audiencias, Juan Marino tuvo al aire a "El Siniestro Doctor Mortis" entre 1945 y 1982, llegando a inscribirlo dentro de los referentes culturales populares más recordados de nuestro país.
Una de sus últimas entrevistas la dio a "El Mercurio" en 2005. Allí se refirió a las historias que relataba como "cosas de terror sin nada filosófico ni literario detrás. Son cosas que nacen solas, sin pensarlas".
Marino aseguraba que la trascendencia de su personaje en la memoria colectiva a través de las décadas le parecía inexplicable, pese a la temática universal que encarnaba. "(Mortis) Es la figura de la muerte, que está en todas partes. Tiene el don de la ubicuidad", explicaba, con el mismo humor que se refería a su propia muerte: "Veo que la de la guadaña va afilando su navaja", decía.