BERLÍN.- El clásico libro de Mark Twain, “Tom Sawyer”, continua siendo uno de los favoritos de la literatura universal, según se ha señalado a días de cumplirse 100 años desde la muerte del escritor estadounidense, el 21 de abril.
"Es el único clásico que logró quedar siempre en la lista interna de la editorial de los 'top 50'", dijo Anke Bruns, de la editorial alemana Arena.
Tiradas en un "nivel bueno y estable para los clásicos" son reportadas también por otras editoriales de libros infantiles que publican las historias protagonizadas por Tom y su compañero de aventuras Huckleberry Finn.
Los clásicos son regalados mayormente por los adultos, como padres, padrinos y familiares que devoraron en el pasado estos libros y que por ser entusiastas lectores o a veces también por nostalgia los vuelven a leer en la actualidad.
Pero Tom y Huck hasta tienen más que ofrecer, según opinaron expertos en literatura infantil.
"'Tom Sawyer' brinda todo lo que un niño necesita como alimento de lectura", sostuvo Otto Brunken, quien se especializa en investigación de lectura y medios infantiles y juveniles en la Universidad de Colonia.
"Huelga, problemas escolares, un episodio de huida, historia de amor, elementos de un policial, búsqueda de tesoro y un final feliz", enumeró.
Esta diversidad, sumada a la profunda sensibilidad del alma infantil, no se logró nunca más desde entonces, según Brunken.
De hecho, los clásicos de aventura de Julio Verne o Karl May prácticamente no puede igualar la riqueza de matices psicológicos.
Brunken dijo que la vida de Tom es verdaderamente peligrosa. "Hay muertos. No hay sólo una tormenta inofensiva, que da miedo", como ocurre en otros libros.
Además, la estructura del relato corresponde al comportamiento del lector infantil. "Ante todo 'Tom Sawyer' tiene, no sólo por la broma y lo cómico, sino también por la estructura en episodios, una y otra vez momentos relajados, que permiten una pausa durante la lectura", señaló Brunken.