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Santiago: Martes 30 de abril del 2024 | Actualizado 07:33
Sumergirse en las 1.685 páginas del Diccionario Enciclopédico de la Música abre puertas y ventanas al auditor común sin adiestramiento teórico formal.
Fondo de Cultura EconómicaSANTIAGO.- Cuando la teoría musical está al alcance de la mano, el auditor común puede llegar más allá en sus propósitos de aprendizaje. La música no es monopolio de quiénes manejan el lenguaje y sus misterios y éste es el mejor ejemplo de esa apertura.
A partir de esta semana estará en librerías el espléndido Diccionario Enciclopédico de la Música, que edita el Fondo de Cultura Económica como una traducción y extensión de conceptos del mundialmente reconocido The Oxford Companion to Music.
El volumen tiene ocho mil entradas en sus mil 685 páginas y fue elaborado por 150 especialistas y editores alrededor del mundo. Sus dimensiones son mayores y debido a ello hacen que su manipulación sea compleja. Sin embargo representa un volumen de consulta que puede, incluso, ocupar un espacio escogido en el hogar. Tendrá un valor cercano a los 77 mil pesos.
Un millón de ideas
La edición del diccionario enciclopédico estuvo a cargo de Alison Latham, quien trabajó sobre las bases de los libros publicados en Oxford en sus ediciones de 1938 y 1983.
En total llega a desplegar un millón de términos, donde se detallan los alcances, por ejemplo, de los períodos de la música clásica, desde el Renacimiento, el Barroco y el Clasicismo hasta el Romanticismo y la Música Contemporánea.
También se abordan conceptos más teóricos y básicos como los de melodía, armonía y ritmo, las familias instrumentales dentro de una orquesta sinfónica, los grandes compositores y sus obras predilectas, las óperas de la historia y otros términos relacionados con la música, no necesariamente docta, sino cercanos al jazz, el rock o el soul.
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