NUEVA YORK.- "Yo también puedo hacerlo", pensó un joven y seguro
Paul Anka cuando escuchó por primera vez en su vida una canción de rock and roll. Se sentó al piano, pensó en una muchacha de su escuela y en unos veinte minutos ya tenía la tierna balada "Diana". En 1957 vendió 8,5 millones de discos con esa canción.
Y el tema convirtió de la noche a la mañana al corpulento adolescente de Ottawa en una megaestrella. Ahora, cuando cumple 70 años (este sábado 30 de julio) el predecesor de Justin Bieber ya es
uno de los grandes de la música norteamericana.
Paul Anka fue en los años '50 y '60 el ídolo de innumerables adolescentes con éxitos como "You are My Destiny" (1958), "Lonely Boy" (1959) y "Put Your Head on My Shoulder" (1968).
A mi maneraAdelgazó, se operó la nariz y se entrenó para mantenerse en forma. Sus fans se rendían ante él, pero no se contentó con el éxito de sus "cancioncitas tontas para adolescentes", como más tarde las denominó. Hijo de un dueño de un restaurante de origen libanés, Anka siguió componiendo y escribiendo para adultos.
Escribió para Frank Sinatra la legendaria "My Way", uno de los grandes éxitos en todo el mundo, que más tarde reinterpretaron Elvis Presley y los Punker Sid Vicious. Barbra Streisand, Engelbert, Sonny y Cher así como Tom Jones ("She’s a Lady") también cantaron canciones compuestas por Paul Anka.
En 1975 publicó su álbum
Feelings, que de nuevo se convirtió en un éxito mundial y figura entre sus trabajos más conocidos. Al menos 15 discos de oro cuelgan en sus paredes.
A pesar de haber desarrollado gran parte de su carrera en Estados Unidos, Anka no se hizo con el pasaporte estadounidense hasta 1990. Con su primera esposa Anne de Zogheb, nacida en Egipto, tuvo cinco hijas: Alexandra, Amanda, Alicia, Anthea y Amelia.
El matrimonio se divorció en 2000 y el segundo matrimonio con la sueca Anna Aberg fracasó en 2009.
En la actualidad, Anka reside en una enorme mansión con vistas al Pacífico en la localidad californiana de Carmel.
Anka sigue subiendo con regularidad a los escenarios y todavía sueña con volver a colocar de nuevo un gran éxito en las listas de venta. "Yo hablé muchas veces con Sinatra de ello. Resulta curioso: no importan quién seas y cómo vaya tu carrera, uno siempre quiere tener de nuevo otro gran éxito. Puedo tener un montón de dinero, pero estoy aquí y pienso: tengo que sacar otro disco", explicó en una entrevista con "Reader’s Digest".
Y para su joven compatriota Justin Bieber, Anka tiene muchos consejos para que no acabe engullido por el mundo del espectáculo: "Tendrá que ser muy, muy cauteloso con a quién escucha y no caer en la droga u otras malas costumbres. Eso acaba contigo y debería mantenerse alejado de ello. Mi educación canadiense me ayudó mucho a ello y espero que a él también se lo hayan inculcado".