SANTIAGO.- Inundadas se encuentran las siete piscinas de la Quebrada de Macul, donde en 1993 se produjo un aluvión que dejó un importante número de personas damnificadas que vivían en los sectores aledaños a Tobalaba con Departamental.
Producto de las intensas precipitaciones que se registran en la capital, el curso de las aguas es bastante intenso, e incluso ha arrastrado desde la precordillera gran cantidad de ripio, troncos y ramas.
A raíz de esta situación, los pobladores que viven en la zona baja de la quebrada han manifestado su temor frente a la posibilidad de que ocurra un nuevo aluvión.
Sin embargo, si bien la situación es crítica, hasta el momento no es de emergencia.
Personal de la Fuerza Aérea y de las municipalidades de Peñalolén y La Florida se encuentran monitoreando el lugar.
Desbordes en Río Mapocho
En tanto, una grave situación se produce a esta hora en el sector de Rinconada de Maipú, luego que el desborde momentáneo del Río Mapocho anegó por completo varias poblaciones.
Las autoridades han debido extremar esfuerzos para evacuar a las personas cuyas viviendas han resultado más afectadas a causa de esta emergencia.
Esta contingencia afectó también a la autopista del Sol, cuyo tránsito se encuentra cortado en ese mismo perímetro, mientras la lluvia continúa cayendo en forma persistente.