SANTIAGO.- Los servicios de salud y los sistemas de urgencia están funcionando adecuadamente, pero el impacto mayor del frente de mal tiempo en la salud de las personas se verá entre hoy y mañana y probablemente el fin de semana, sostuvo la ministra de Salud, Michelle Bachelet, tras efectuar un recorrido por los principales centros asistenciales de la capital.
Consultada por radio Chilena sobre los pacientes que tenían hora tomada para atención médica, dijo que se han suspendido todas las cirugías electivas, las que serán reprogramadas.
Al respecto, expresó: "Lo lamento, sé que hay personas que han estado esperando muchos meses, pero, en este momento, yo creo que todos tenemos que ser solidarios con quienes lo están pasando más mal".
Agregó que "estamos asegurando que haya camas para hospitalizaciones porque en estos cuadros respiratorios a veces se complican con nuemonia y requieren oxígeno. Estamos reforzando los turnos para atender adecuadamentea a la gente".
Respecto a las medidas sanitarias tendientes a prevenir problemas de salud, indicó que todos los albergues están siendo visitados por rondas médicas para hacer educación en términos de prevención en cuadros respiratorios, diarreas, sarna o pediculosis.
RECOMENDACIONES
La ministra de Salud llamó a las personas que están en sus casas evitar, aunque sea obvio, enfriamientos y en el caso que la vivienda esté anegada es recomendable que los niños y adultos mayores se vayan a albergues.
En estos lugares se ha recomendado que no se fume ya que el humo en una pieza de tres por tres es parecido a los niveles de preemergencia y el humo daña las vías respiratorias.
Y si se está usando parafina o brasero hay que apagarlos en el exterior de los recintos. Además, no se deben colocar tiestos y teteras a calentar sobre las estufas porque se humedecen la ropa y las paredes.
En tanto, en las casas anegadas es recomendable cortar la luz para evitar corto circuitos.
Y tras las lluvias, limpiar las paredes con agua con cloro las casas que se hayan inundado con aguas servidas.
Además, lavarse las manos con agua y jabón después de ir al baño y antes de preparar y consumir los alimentos y cada vez que cambien los pañales de los niños, como una forma de evitar las enfermedades entéricas, diarreas y hepatitis.