SANTIAGO.- Posiciones encontradas en torno al tema de las reformas constitucionales se siguen advirtiendo a través de las declaraciones de la derecha, la concertación y el gobierno.
El secretario general de la UDI, diputado Juan Antonio Coloma, pidió al gobierno "más democracia y menos autoritarismo" porque a su juicio la Alianza por Chile coincide con la concertación en un 80 por ciento de los cambios a la Carta Fundamental. Sin embargo, dijo, el ejecutivo sólo se fija en los disensos. Por ello Coloma solicitó al gobierno que se abra al acuerdo constitucional.
"Yo le pido al gobierno que sea mucho más democrático y más abierto y que trabajemos las reformas constitucionales donde hay consenso. Lo han pedido durante mucho tiempo entonces ahora que hay posibilidades de ese consenso están tratando e evitarlo incorporando elementos de disenso", criticó.
El presidente de la Democracia Cristiana, Ricardo Hormazábal, en tanto, acusó a la derecha de proponer reformas con el sólo objetivo de afianzar su poder político.
"La derecha sólo está proponiendo aquellas cosa que le quitan poder al gobierno y proponiendo reformas que incrementan su poder en el país... La derecha sólo está planteando reformas para aumentar su poder político y no para generar una carta constitucional equilibrada", acusó.
Para la autoridad, a su vez, existe una sola alternativa de acuerdo que es modificar todos los enclaves autoritarios heredados del régimen militar. Así lo sostuvo el ministro del Interior, José Miguel Insulza, quien precisó que no hay motivos para mantener a las ramas castrenses como garantes de la institucionalidad.
"No veo por qué razón tiene que haber garantes que le digan a los poderes del Estado lo que tienen que hacer. No me parece razonable que existan ese tipo de disposiciones en la constitución", opinó.
Otra fuente gubernamental, el ministro Secretario General de la Presidencia, Alvaro García, dijo que el ejecutivo sólo está abierto a revisar los plazos pero no el contenido de las reformas. Añadió que si la derecha teme que sea el Presidente Ricardo Lagos quien nombre a los jefes castrenses, podría acordarse que la norma comience a regir a partir del 2006.
"Estamos dispuestos a flexibilizar los plazos y si la oposición no quiere que el actual Presidente pueda promover y remover, dejemos instituido en la constitución que los presidentes podrán hacerlo a partir del año 2006. Pero lo que no estamos dispuestos a transar es el carácter democrático de la constitción y un elemento fundamental de la democracia es el respeto y el mando que tiene el Presidente de la República sobre sus Fuerzas Armadas", enfatizó.
