SANTIAGO.- Una notoria disminución experimentaron este año los casos de niños quemados por fuegos pirotécnicos durante las celebraciones de fin de año, los cuales -según Coaniquem- no requirieron hospitalización amputaciones de ninguna índole.
La entidad dio conocer un último catastro de notificaciones epidemiológicas de quemaduras infantiles por fuegos artificiales del tipo de uso doméstico, la que comprende 432 puntos de notificación (Servicios de Urgencia Pediátrica) desde Arica a Punta Arenas, y que registra casos de menores de 15 años.
De las cinco notificaciones de quemaduras, cuatro casos son por manipulación de artefactos pirotécnicos, mientras que el restante corresponde a un caso de alguien que veía cómo se operaban estos fuegos.
De los cinco afectados, tres son varones y dos son niñas, cuyas edades fluctúan entre 10 y 11 años. También se estableció que cuatro de los accidentes se produjeron en la madrugada del 1 de enero.
