SANTIAGO.- El Colegio Médico, y los gremios de la Salud consideraron hoy que lo más grave de la aprobación ayer en el Senado del Proyecto de Autoridad Sanitaria es que el sistema de Salud aparece hoy con un carácter público-privado.
El presidente del Colegio Médico, Juan Luis Castro, explicó que con la iniciativa, la fiscalización de los hospitales se entregó a manos de privados, lo que los transformaría en jueces y parte de sus propios intereses.
"Está normado desde hace bastante tiempo que la fiscalización debe ser estatal, y no puede ser entregada a terceros", dijo Castro, quien agregó que es muy difícil compatibilizar los intereses comerciales con la fiscalización, hecho que se comprueba con experiencias pasadas que han sido "nefastas".
El dirigente médico reprobó también el hecho de que los directores de los hospitales seguirán siendo elegidos por confianza política, e insistió en que la nueva ley no resolverá la deuda hospitalaria.
Respecto a los incidentes que protagonizaron trabajadores ayer en el Congreso, el director de la Confusam, Esteban Maturana, explicó que fueron provocados por la violencia excesiva con la que actuó la fuerza pública.
Además aseveró que la batalla "aún no ha terminado" y que el gran enfrentamiento se producirá cuando se vote el plan AUGE, debido a los perjuicios que traerían las diferencias entre los afiliados al plan y los que no lo acogerán.
"Nosotros seguiremos impulsando todas las acciones en todos los terrenos de la salud", afirmó.
Los representantes de los gremios de la Salud dijeron estar sorprendidos por el desconocimiento que había entre los parlamentarios sobre el tema, y aseveraron que no más de 10 de ellos conocían los contenidos del proyecto que se estaba votando.
"Esta ley nace con diferencias muy profundas entre quienes la legislaron y entre quienes debemos construirla", aseveraron.
Sobre las declaraciones de la senadora UDI Evelyn Matthei, Maturana dijo que la parlamentaria "falta a la verdad al decir que no hemos entregado propuestas ni argumentos, y al decir que estamos reclamando por plata".
Castro, a su vez, aseguró que la aprobación de estos proyectos sólo se entiende porque "hubo una gran presión política de carácter económico" y acusó directamente a las isapres de tener de demasiada influencia en el "negocio de la salud".
Otro de los problemas que acusaron los gremios es la posición desfavorable que tendrían las personas de la tercera edad. "Ellos deben hacer una cotización del 7% y ni siquiera se les dará la posibilidad de obtener atención gratuita en los consultorios", dijo el presidente del Colegio Médico.
Finalmente, Germán Rodríguez, presidente subrogante de la Confenats, aseveró que su agrupación establecerá un "contexto de batalla" para oponerse al AUGE.
