Francisco Javier Cuadra. |
SANTIAGO.- El Consejo Directivo Superior de la Universidad Diego Portales oficializó hoy la renuncia de Francisco Javier Cuadra a la rectoría, a raíz de los cuestionamientos por su presunta responsabilidad en las violaciones a los derechos humanos durante el régimen militar.
En una sesión extraordinaria, el consejo aceptó, por unanimidad, la decisión de Cuadra de dejar la casa de estudios, luego del movimiento al interior del plantel que pedía su inhabilitación debido a sus contradictorias versiones sobre la muerte de cuatro profesionales, tras el atentado al general Augusto Pinochet en 1986.
El ex ministro Secretario General de Gobierno confesó estar muy dolido con la decisión y reiteró que se siente como un chivo expiatorio.
"...Un sentimiento de pena muy grande porque son muchos años vinculados a la universidad y naturalmente el trabajo académico que realizo desde 1983 seguirá siendo desempeñado", declaró.
El cargo de Cuadra será asumido por el rector fundador y presidente de la Universidad Diego Portales (UDP), Manuel Montt, mientras no se designe al sucesor del ex ministro.
Al comentar la decisión, Montt dijo que se aceptó la renuncia de Cuadra debido a la gravedad de los antecedentes, si bien valoró el desempeño del académico mientras estuvo a cargo de la universidad.
El origen de los cuestionamientos
La crisis al interior de la Universidad Diego Portales se generó a raíz de una entrevista que Cuadra hizo al "Diario Siete", en la que afirmó que la detención de dirigentes políticos en septiembre de 1986 -entre ellos, el Presidente Ricardo Lagos- sirvió para salvarles la vida.
Esas declaraciones hicieron eco en la investigación que sigue el juez Hugo Dolmestch por los asesinatos de cuatro personas por parte de la CNI, ya que el magistrado instruyó a la Policía de Investigaciones a que realice un informe de inteligencia sobre las publicaciones de prensa en torno a los hechos.
El 4 de noviembre pasado, un sector académico de la UDP conformado por 74 profesores de cuatro facultades -Derecho, Ciencias Sociales e Historia, Comunicación y Letras, y Ciencias Humanas y Educación- pidió la inhabilitación de Cuadra por la incongruencia de su versión de 1986 respecto de la dada el 25 de octubre a la prensa escrita. En esa época, tras ser consultado por el asesinato de los cuatro profesionales, dijo que habían muerto en enfrentamientos entre subversivos.
Luego, fue la Federación de Estudiantes (Fedep) la que solicitó la dimisión a su cargo de rector.
Al respecto, el ex personero ha dicho que no tiene responsabilidad jurídica en los hechos ocurridos en 1986, "pues nunca participé como autor, cómplice o encubridor", y que cuando ejerció el cargo de vocero de Gobierno no contó con información como la lograda más tarde con los informes Rettig de 1991 y Valech en 2004.
Desde el lunes de la semana pasada, la representación de la universidad estaba en manos del presidente de la Fundación y rector fundador, Manuel Montt, luego que Cuadra pidiera un permiso administrativo para acreditar su inocencia.
