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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 20:43
SANTIAGO.- Confiado en que la acusación constitucional contra la suspendida ministra de Educación, no correrá la misma suerte en el Senado que en la Cámara de Diputados, se manifestó esta mañana el ex titular de Justicia, Luis Bates, quien está a cargo de la defensa de Yasna Provoste.
"El Senado es un tribunal de Justicia para estos efectos, a diferencia de la Cámara, y como dice la Constitución resuelve como jurado. Eso quiere decir que tiene una amplitud en el ámbito de la conciencia de los senadores para resolver lo que se va a plantear. De tal manera que, a mi juicio, los temas jurídicos deberían tener una mejor receptividad", señaló el abogado a Emol.
Bates dijo tener claro que el libelo acusatorio está dentro en un contexto político, pero aún así recalcó "uno siempre tiene mucha fe en el derecho y especialmente en la instancia del Senado, por tener el carácter de un tribunal especial de Justicia".
Por ello, afirmó que los cálculos políticos que se están sacando, considerando la nueva mayoría parlamentaria, no deberían ser tan claros en la Cámara Alta que deberá pronunciarse entre el 15 y el 16 de abril.
Un aspecto complejo para Provoste es que los senadores votarán los cinco capítulos de la acusación por separado y basta que sea aprobado sólo uno de ellos para que la ministra resulte destituida.
Respecto a la derrota sufrida ayer en la Cámara de Diputados, Bates, al igual que su representada, reconoció que ésta era previsible, señalando que se trató de una votación netamente política, donde se actuó en bloque y donde también incidieron situaciones personales.
"Mi exposición influyó poco en el sentido de que si uno ve, por ejemplo, que un parlamentario llega a votar en silla de ruedas a uno le hace pensar que es muy difícil hacerle cambiar de opinión", declaró.
El abogado adelantó que realizará una defensa oral de la ministra una vez que concluya la exposición de los tres diputados de la Alianza que sostienen la acusación constitucional en el Senado.
Frente a la posibilidad de que Provoste renuncie a su cargo para que la Cámara Alta vote en contra de su destitución, Bates respondió con un escueto "no que yo sepa".
Según la Constitución, para destituir a la secretaria de Estado se requiere el voto de la mayoría de los senadores en ejercicio, es decir, veinte votos, que son los que hoy suman la Alianza y la nueva bancada independiente.
Si la oposición y los independientes votan en bloque la ministra tendrá que abandonar sus funciones en forma automática y quedaría inhabilitada para ejercer cargos públicos o de representación popular durante los próximos cinco años.
