Los efectivos fueron identificados como el sargento segundo Juan Altamirano, el cabo primero Patricio Mena y el cabo segundo César Vidal, quienes podrían estar implicados en la desaparición del menor José Huenantes.
Durante la audiencia, el fiscal Sergio Coronado presentó una serie de antecedentes que señalan que no hay concordancia entre las declaraciones de los policías, los registros oficiales y la versión de testigos, y presume que el joven desaparecido fue golpeado y asesinado.
"Es lo más probable, pero así como hemos sido serios en la exposición de los antecedentes que tenemos en la carpeta, no estoy en condiciones de decir que fue, de alguna manera, lesionado por estos funcionarios o que le causaron la muerte, pero sí que fue detenido y no se sabe dónde está", explicó.
Según se reveló en la audiencia, el grupo de carabineros habría alterado documentación en torno al kilometraje recorrido la noche del incidente y el número de detenidos, por lo que el magistrado a cargo del caso determinó que sea confiscado el automóvil donde se movilizaban los funcionarios policiales.
En el curso del proceso, la Fiscalía de Puerto Montt ordenó la excavación de pozos y el rastreo de cauces de agua sin dar con el cuerpo de Huenantes.
En tanto, el teniente coronel Patricio Moya, prefecto de Llanquihue, lamentó el hecho, pero indicó que sobre la base de la presunción de inocencia los tres efectivos no serán dados de baja, aunque permanecerán en prisión preventiva.
Los policías detenidos permanecen privados de libertad en la Segunda Comisaría de Puerto Montt.