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Autoridades visitan a vecinos afectados por caída de cenizas del Cordón Caulle

El gobernador de Ranco, Eduardo Hölck, aprovechó la oportunidad para desmentir el rumor de que la grieta del volcán se ha ensanchado y aseguró que no existe peligro.

22 de Noviembre de 2011 | 17:22 | UPI
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Mario Quilodrán, El Mercurio. (Archivo)

SANTIAGO.- A la Escuela de Mantilhue y luego a Rucatayo Alto, de la comuna de Río Bueno, llegó el gobernador de Ranco, Eduardo Hölck, acompañado del alcalde, Luis Reyes y de funcionarios de Indap, SAG, Onemi y Servicio de Salud, para conversar en terreno con vecinos afectados por la caída de ceniza del Caulle, ver su situación a casi seis meses de la erupción, dilucidar dudas y tomar precauciones para los meses venideros.


El gobernador señaló en la actividad que "desde el día de la emergencia, este Gobierno ha estado con cada uno de los afectados, monitoreando en terreno y como ente articulador, toda la zona afectada".


En su intervención hizo un llamado a los vecinos a estar tranquilos pero de manera responsable. "Desde un comienzo hemos medido la fuerza del volcán. En un minuto se registraban mil sismos por hora y con el correr de los meses éstos han disminuido considerablemente", indicó.


Además agregó que por estos días las cenizas se han percibido más, pero que no han aumentado. "Las condiciones climáticas hacen percibir que hay más ceniza pero no ha aumentado. Las lluvias de estos días apaciguarán las molestias provocadas, pero hay que aprender a convivir con ellas", dijo.


Aprovechó también de desmentirles a los vecinos el rumor del ensanchamiento de la grieta, manifestando que vulcanólogos han descartado la existencia de peligro.


Para el alcalde de Río Bueno, Luis Reyes, está reunión toma suma importancia pues es importante que los vecinos se mantengan informados de las gestiones realizadas y medidas tomadas por las autoridades para seguir enfrentando esta situación. Además se comprometió con los vecinos a mejorar los traslados y cargas de agua potable para las zonas afectadas.


Con respecto al agua, el fiscalizador de la Seremi de Salud, señaló que el agua tiene niveles normales producto de la erupción y que mientras sea tratada, hervida, es consumible.


Por su parte, Pilar Gómez, del SAG, hizo un llamado a los vecinos a que denuncien la muerte de los animales, pues "es la única manera de poder llevar un catastro de las posibles muertes provocadas por las cenizas". Hasta la fecha sólo se han denunciado 30 muertes, las cuales luego de las necropsias, no corresponden a muertes por cenizas.


El Indap, en tanto, manifestó que seguirá con su red de trabajo, viendo como fomentar el sector y las medidas a tomar para los meses venideros.


La encargada (s) de Onemi en la zona, Ilse Sepúlveda, llamó a la responsabilidad de los vecinos, a cuidarse y a contar con este servicio como red para sus necesidades. Además sostuvo que durante todo este periodo han monitoreado seis veces al día el volcán y las zonas afectadas.


En ambas localidades dejaron mascarillas para los vecinos, resaltado la importancia de su uso como medio de prevención de alergias, dolores de cabeza, etc. "Es bueno que si se sienten mal acudan a la posta, para llevar un seguimiento de las posibles enfermedades", dijo.

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