SANTIAGO.- Este sábado será una jornada histórica para la DC, ya que por primera vez en sus 75 años elegirá en una elección abierta y vinculante a su candidato presidencial. En ella, los protagonistas serán la actual senadora por el Maule, Ximena Rincón, y el ex alcalde de Peñalolén, Claudio Orrego, quienes aspiran a obtener el cupo que les permita llegar a las primarias de la oposición.
De este modo, los precandidatos cerrarán una etapa que no estuvo exenta de críticas debido a la conveniencia de sus campañas, considerando la ventaja que Michelle Bachelet ostenta en las encuestas. Por ello, ambos han defendido con fuerza su derecho a participar y reafirmar de ese modo la identidad e importancia de la DC al interior de la oposición.
Tanto Rincón como Orrego conversaron con Emol sobre sus aspiraciones y de las definiciones que poseen acerca de distintos temas del país. Revise a continuación qué es lo que piensan hacer si resultan electos.
¿Por qué quiere ser Presidente de Chile?
R: Porque en nuestro país la inequidad se ha instalado y no quiero seguir intentando que cambie, quiero cambiarlo. Por eso quiero ser Presidenta, para hacer una revolución en la que todos sean parte de las oportunidades y no terminemos en un país de privilegiados.
O: Porque creo que nuestro país tiene que dar un salto en su desarrollo humano. Para mí, no es sólo crecimiento económico, sino que también una mejor distribución de la riqueza y mejor calidad de vida. Para eso se requieren nuevos liderazgos y yo creo tener esos atributos para ser un buen Presidente.
¿Cuáles son sus principales atributos para ser Presidente?
R: Mi capacidad para escuchar, para sumar voluntades y conducir acuerdos. He mostrado que me rebelo ante los acuerdos entre cuatro paredes, contra los políticos que no se atreven a los cambios y contra los que tienen miedo a las diferencias.
O: Tengo un profundo amor por Chile, una pasión por el servicio público. Para mí, esto no es una profesión o un accidente, es una vocación de vida. Soy bueno para formar equipos, tengo coraje para enfrentar los problemas difíciles y creo tener experiencia de cercanía con la ciudadanía.
Si hoy gana, se enfrentará eventualmente a Michelle Bachelet. ¿Cuáles son sus ventajas ante la ex Presidenta?
R: Yo no tengo dudas en expresar lo que creo, siento y pienso. No me he quedado en la reflexión, yo he acometido con propuestas. Creo que no podemos seguir mirando hacia atrás, el país demanda de nosotros propuestas, valentía y no diagnósticos.
O: Soy una persona de una nueva generación, la gente no quiere más de lo mismo ni de los mismos. En un país cansado del centralismo, yo represento el poder de las comunas, sería el primer Presidente tras ser alcalde en Chile y eso me pone en más cercanía con la ciudadanía.
¿Cuáles son las principales debilidades de la ex Mandataria?
R: No puedo hablar de debilidades respecto de alguien que no sabemos si va a estar compitiendo. Hoy no sé qué quiere hacer, yo tengo claro lo que quiero hacer en Chile, no espero a que los demás se pronuncien, no medito eternamente lo que voy a hacer o no y no busco a otros para que hablen por mí.
O: Más que debilidades, todos tenemos una historia. Ella tuvo sus errores, como todo gobernante, y en ese sentido creo que ella tiene –desde el punto de vista de los cambios que hay que hacer- algunos pasivos, porque la gente podrá decir ‘bueno, porque no lo hizo cuando fue Presidenta’.
¿Cómo disminuiría los niveles de desigualdad en Chile?
R: Uno de los planteamientos tiene que ver con una reforma tributaria ambiciosa, pero no imposible, que se plantea desde lo que Chile puede hacer. Esta reforma debe recaudar más, ser más equitativa en la recaudación, ser más justa y eficiente y que no concentre los recursos en las capitales regionales.
O: Aquí no hay varita mágica, creo que la reforma tributaria es parte de la solución pero no toda la solución. Hay que recaudar más y cambiar la estructura de quien paga, ya que las empresas y los ricos pagan menos, pero también ver en qué se gasta. Es necesaria una reforma al trabajo para fortalecer los sindicatos y así puedan pelear por mejores condiciones laborales.
¿Cuáles son sus propuestas en cuanto a Educación?
R: Revisar los recursos que se destinan a la educación pública y reestructurar completamente el sistema. Los liceos técnicos no tienen campo laboral, hay que ver qué es lo que el país necesita. ¿Quién está definiendo lo que se necesita, los que emprenden en educación y las carreras que ofrecen o el país? Un Estado garante de verdad.
O: Hay que aumentar y mejorar la educación preescolar y muy especialmente la técnico profesional. Hoy día los más pobres no están estudiando carreras tradicionales, sino carreras técnicas de dos años, pero no tienen el apoyo del Estado para financiarse ni para tener seguridad de que esas carreras son las que necesita el mercado.
¿Puede existir lucro en la educación?
R: Obviamente, el lucro como en la U. del Mar violenta, porque son recursos públicos que debieran ir en beneficio de la ciudadanía. Eso tenemos que terminarlo, creo en la educación pública, gratuita y de calidad y en eso no hay que tener doble discurso.
O: El lucro distorsiona la educación. Si alguien quiere poner un colegio con fines de lucro que lo haga, pero sin aporte del Estado. El que quiera aporte del Estado debe ser sin lucro y sin discriminación a los estudiantes.
¿Cómo enfrentará el tema de la energía en el país?
R: No podemos seguir entregando a las empresas la definición de lo que vamos a hacer en materia energética. Tenemos que hacer desde el Estado una definición, por eso trabajé en un proyecto de acuerdo en el Senado para transformar a la Enap en la Empresa Nacional de Energia.
O: Nosotros necesitamos una política de Estado que trascienda el gobierno de turno y que le asigne al Estado un rol importante en materia de planificación. Un rol activo en la creación de una empresa nacional de energía, que contribuya en la inversión de aquellas obras que los privados no están dispuestos a hacer.
¿Cuál es su posición frente a proyectos como HidroAysén?
R: Proyectos como esos no debieran desarrollarse, ya que todas las instancias técnicas dicen que no deben realizarse. Nuestro planteamiento ha sido clarísimo: 20, 20, 20. 20% de eficiencia y ahorro, 20% de energías renovables no convencionales de aquí al 2020.
O: El problema hoy es que los proyectos se definen caso a caso y en función de los intereses privados. Me gustaría que tuviéramos una planificación y que primara el interés común. Creo en la importancia de la hidroenergía y me gustaría que el Estado dijera donde hacer esos proyectos y que los privados vean cómo hacerlo al menor costo.
¿Cuál es su postura frente al matrimonio homosexual?
R: En materia de relaciones de pareja, creo que es el amor el que tiene que primar en nuestras visiones sin discriminación. Las personas del mismo sexo tienen derecho a vivir juntos y a tener resguardos desde el punto de vista civil en igualdad de condiciones.
O: Creo en la dignidad del ser humano y estoy en contra de cualquier tipo de discriminación, he apoyado con firmeza el AVP y la ley antidiscriminación. Respecto al matrimonio, he sostenido al igual que la mayoría de los chilenos que es entre un hombre y una mujer.
¿Cómo abordaría el futuro de la relación entre Chile y sus vecinos?
R: No somos una isla, creo que hay que hacer un esfuerzo para potenciar nuestro desarrollo en ese contexto. Las alianzas son fundamentales y hoy tenemos dos conflictos. Ahí no hay doble discurso, los tratados existen y hay que respetarlos.
O: La postura de Chile ha sido muy contundente. Si Bolivia quiere tener conversaciones bilaterales con Chile y Perú para buscar una salida al mar que no signifique detrimento del territorio chileno, nosotros estamos dispuestos.