WASHINGTON.- Alan Wood, un pedófilo que se aproximaba a los niños por Internet fue condenado en Wisconsin a una pena insólita: pasará 18 días en la cárcel, estará durante 20 años en libertad vigilada y tendrá que pasar 400 horas enseñando a los padres cómo utilizar Internet y desarrollar medios para proteger a sus hijos de los pedófilos informáticos.
Wood fue condenado por haber intentado atraer a una trampa sexual a una niña de 13 años a la que Conoció on line.
En realidad la niña no existía sino que se trataba de un agente de policía que navegaba en la red en busca justamente de pedófilos.
La condena a Wood, que no había cometido aún ningún acto de violencia física, es la primera vez que ocurre y fue decidido de manera independiente por un magistrado de Jefferson, en Wisconsin.
En Estados Unidos, el principal instrumento legal en contra de la pedofilia y los delitos sexuales en general es la "ley de Megan".
Nacida como ley en Nueva Jersey, en 1994, fue transformada en directiva federal por Bill Clinton en 1996. Requiere que los condenados por delitos de pedofilia notifiquen a la policía local su presencia en una comunidad, cuando se mudan al lugar.
La policía advierte entonces a las escuelas, jardines de infantes y familias locales de la presencia en la zona de un condenado por delitos sexuales contra menores.
La ley toma el nombre de Megan Kanka, una niña de 7 años que fue violada y asesinada en Nueva Jersey en 1994.
La lista de los pedófilos es también accesible a los ciudadanos vía Internet.
Estas listas, criticadas por los defensores de los derechos civiles, permiten individualizar a este tipo de delincuente a través de nombres, ciudades y otros datos relativos a delitos por los cuales fueron condenados.
Algunos permiten incluso a los ciudadanos proporcionar informaciones sobre el comportamiento de los pedófilos en libertad.
Casi todos contienen una advertencia: es ilegal utilizar las informaciones para molestar a los pedófilos y desalientan cualquier forma de control.
Los defensores de la privacidad y libertad constitucional surgieron en contra de estas publicaciones informáticas, incluso en tribunales, obteniendo también distintas victorias y restricciones de acceso a las listas.
Pero precisamente el estado de Nueva jersey, que dio origen a la ley de Megan, se dispone a llamar a las urnas a los propios ciudadanos para sancionar una modificaciones de la constitución estatal que permita difundir por Internet los datos sobre los pedófilos.
La cita con el referéndum en favor o en contra de la enmienda constitucional es para el 7 de noviembre, el día en que Estados Unidos elige a su nuevo presidente y vota, además, por centenares de consultas locales.
Si los ciudadanos están de acuerdo, Nueva Jersey será el primer estado que, con autorización constitucional, tendrá actualizado un registro estatal de pedófilos condenados que podrá poner a disposición de todos por medio de Internet.