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Santiago: Sábado 27 de julio del 2024 | Actualizado 01:00
NUEVA YORK.- El portal eBay, la mayor empresa del mundo de pagos y subastas online, lanzó el miércoles una página web que permite a inversores comunes comprar valores dirigidos a mejorar las condiciones de vida en los países más pobres del mundo.
MicroPlace, colgada en www.microplace.com, permitirá a la gente invertir desde US$100 dólares para apoyar el desarrollo en zonas empobrecidas.
La llamada microfinanciación es el suministro de préstamos, ahorros, seguros y otros servicios financieros básicos para hogares y negocios con bajos ingresos, normalmente sin avales. A menudo se dirige a economías en vías de desarrollo, donde la gente no puede conseguir préstamos bancarios.
La microfinanciación trabaja en más de 100 países, y normalmente es ofrecida por instituciones financieras o inversores más adinerados.
Ganó un mayor renombre el año pasado, cuando el economista de Bangladesh Muhammad Yunus -que fue pionero en la práctica en 1976- y el Banco Grameen que él fundó, ganaron el premio Nobel de la Paz.
"Los mercados del capital están despertando a esta clase de activos", dijo en una entrevista Tracey Pettengill Turner, fundadora y directora general de MicroPlace.
"Esto es algo diferente porque es un servicio basado en Internet para que el inversor corriente invierta en microcréditos, y logre un beneficio de la inversión mientras resuelve la pobreza en el mundo", agregó.
Turner dijo que ha estado en Bangladesh y trabajó en el Grameen en 1998 tras haberse graduado en la Escuela de Negocios de Stanford Business School. Expresó además que vendió MicroPlace a eBay en junio del 2006.
Otro sitio de microfinanciación, Kiva.org, dijo la semana pasada que ha construido una cartera de préstamos de 13 millones de dólares en sus primeros dos año, para ayudar a unos 20.000 emprendedores.
Otros sitios similares son el de Finca International (http://www.villagebanking.org) y el de Acción International (http://www.accion.org).
MicroPlace escogió la Fundación de Inversión Social Calvert para ofrecer sus primeros 10 valores, en los que el dinero estaba destinado a países como Camboya, Ecuador, Ghana y Tayikistán.
Turner explicó que las entidades emisoras "por lo general tienen informes de comportamientos muy buenos, a menudo con diez años de inversiones en microcréditos sin faltas", y añadió que las entidades emisoras a menudo mantienen reservas para limitar el riesgo potencial.
