Un aumento del presupuesto estatal procurará la conectividad en todo Chile

Un importante movimiento en el ámbito tecnológico de Chile se ha registrado estos últimos días, con dos hechos significativos, y los dos en regiones.

Fue en Aysén, durante la inauguración del trazado de fibra óptica submarino que llegó a Chaitén –y que seguirá por Aysén-, que la Presidenta Michelle Bachelet hizo un interesante anuncio: 40 mil millones se invertirán para la conectividad de zonas aisladas, hasta el 2010. “Entre el año 1994 y el 2005 se destinaron 10 mil millones de pesos a esta área, entre 2005 y 2007 otros 10 mil millones, y ahora serán 40 mil millones”, dijo a Emol el Subsecretario de Telecomunicaciones, Pablo Bello, desde Yungay.

Se ha trabajado con el Ministerio de Agricultura, Sernatur y con los Gobiernos Regionales, para identificar los territorios del país que tienen una mayor deficiencia en conectividad, para así trabajar directamente sobre ellos.

“Hay lugares en Chile que, por ejemplo, tienen un potencial de desarrollo turístico muy importante, que puede generar mucho trabajo y aportar con divisas, y para ello es indispensable que esté conectado. Nadie va a venir al extremo austral del mundo si no tiene cómo comunicarse, y esos lugares tampoco pueden publicitarse”, dijo Bello.

Con este presupuesto, “que es por lejos el más alto destinado para estos fines”, se espera que para el bicentenario (en el 2010), el 95% de los hogares rurales tengan acceso a esta oferta de conectividad, principalmente Internet, telefonía fija y móvil, y así aumentar el 1% que se registró en el Censo del 2002, para reducir de forma considerable la llamada “brecha digital”.

Televisión para todos

En otra actividad importante, se transmitió por primera vez en Latinoamérica televisión digital en una población rural. El lugar elegido fue Yungay, un poblado de la Octava Región, donde se instaló un transmisor de baja potencia en la torre de la iglesia del lugar, y marcó un hito para la televisión regional de Chile, como dijo Pablo Bello. La iniciativa corrió por parte de la Asociación Regional de Televisión (Aretel) Bío Bío y se hizo de acuerdo a los estándares de la norma europea para la televisión digital.

La idea era probar los equipos -facilitados por una empresa española, ya que Aretel cuenta con el apoyo de la Comunidad Europea-, y acercar a la gente a esta nueva tecnología. Para ello se les dio decodificadores para que los conectaran a sus propios televisores y vieran lo que era la televisión digital. Y la respuesta fue buena: todos concordaron en la buena calidad de la señal, y aprovecharon la instancia para entender mejor de qué se trata esta tecnología de la que tanto se habla.

“Nosotros como Aretel hemos apoyado públicamente la norma europea para la televisión digital. Como canales regionales quisimos asociarnos y hacernos presentes en el debate sobre el estándar que se adoptará para Chile”, dijo Mariano Arana, presidente de Aretel Bío Bío. “Hay razones económicas que nos hacen preferirla por sobre otras. Un decodificador costaría unos 15 mil pesos, mientras que si la norma es la estadounidense, podría costar unos 50 mil pesos. Lo mismo pasa con el resto de los equipos”, explicó Arana.

Pero más allá, hay una intención descentralizadora y democratizadora detrás. Tanto para el gobierno como para Aretel, ya que estos últimos ven una importante posibilidad de crecer con la televisión digital. Ahora, sus canales pueden ser vistos sólo a través del cable, y un 70% de la población no tiene acceso a una televisión local. “Tendríamos la opción de transmitir una programación orientada a esas personas y de manera gratuita”.
Esto coincide con la idea del gobierno para la televisión digital, como explica Pablo Bello.

Porque aparte del tema tecnológico, hay una intención de desarrollar una política pública al respecto, “de manera que el cambio a la televisión digital favorezca a los medios regionales. Esto tiene que ver con lo que la Presidenta ha anunciado: democratizar la televisión, ampliar la oferta regional”, dijo Bello. “No es posible que todos los chilenos y chilenas se despierten en la mañana escuchando cuál es la restricción para Santiago o viendo el tráfico de la capital, porque Santiago no es Chile”, agregó enfático, dejando clara la intención del gobierno de procurar una diversidad programática, en la que todos tengan cabida y se vean representados.

Y la norma ¿cuándo?

Con respecto a la decisión sobre qué norma adoptará Chile, el Subsecretario de Telecomunicaciones no dijo si prefería una por sobre otra, y que todas permitían un aumento de la calidad de la imagen, como también la posibilidad de tener más canales en televisión abierta. Pero que la decisión se tomará muy pronto, antes de Navidad, porque tienen presente el aumento de las compras de los televisores en esa fecha, y la idea es que la decisión ya esté tomada para entonces. “Estamos terminando los análisis técnicos para presentarle el informe a la Presidenta y que pueda tomar una decisión”, que ciertamente, será definitiva, para que antes del 2010, tengamos televisión digital en Chile.