A principios del año pasado Tesla fue objeto de una fuerte polémica a raíz de denuncias de conductores que señalaban que sus vehículos eléctricos
sufrían inesperadas y repentinas aceleraciones, poniendo en peligro la vida de los ocupantes.
En ese entonces la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) de Estados Unidos anunció una exhaustiva investigación formal a poco más de
500 mil vehículos de la empresa, indagación que terminó hace pocos días.
Según informó el medio The Verge, la NHTSA determinó que el fenómeno fue causado por la “
aplicación incorrecta del pedal”, es decir, el problema fue ocasionado por los propios conductores de los autos Tesla.
“
No hay evidencia de ninguna falla en los ensambles del pedal del acelerador, los sistemas de control del motor o los sistemas de frenos que haya contribuido a cualquiera de los incidentes citados”, indicó la agencia de seguridad.
En ese sentido añadió que
“no hay evidencia de un factor de diseño que contribuya a una mayor probabilidad de mal uso del pedal. La teoría proporcionada de una posible causa electrónica de SUA en los vehículos en cuestión se basa en suposiciones inexactas sobre el diseño del sistema y los datos de registro”.
Cabe destacar que
Tesla ha sido blanco de críticas por situaciones similares desde hace años, pero la empresa de Elon Musk ha señalado en distintas oportunidades que ha trabajado en todas las posibles fallas mediante actualizaciones del sistema.