Desde que Joe Biden asumió como Presidente de Estados Unidos, la
electromovilidad ganó un nuevo impulso en uno de los mercados automotrices más importantes del mundo ya que el nuevo mandatario se ha declarado como un férreo defensor de las energías bajas en emisiones y de las acciones que permitan mitigar el calentamiento global.
De hecho, hace unas semanas anunció que su administración iniciará un ambicioso programa para
renovar toda la flota de vehículos federales por unidades 100% eléctricas, en lo que contempla alrededor de 645 mil vehículos.
En ese mismo escenario, el líder de la mayoría en el Senado estadounidense, el demócrata Chuck Schumer, quiere llevar adelante un plan aún más fuerte al
reemplazar todos los vehículos a combustión interna del país por alternativas cero emisiones.
“Es un nuevo plan audaz diseñado
para acelerar la transición de Estados Unidos a todos los vehículos eléctricos, para desarrollar una infraestructura de carga y para hacer crecer los empleos estadounidenses a través de la fabricación limpia", dijo Schumer al medio The Verge.
En ese sentido añadió que “
el objetivo final es que todos los automóviles fabricados en Estados Unidos sean eléctricos para 2030 y que todos los automóviles en la carretera sean cero emisiones para 2040".
Incentivos a conductores, empresas y nueva infraestructura
La propuesta de Schumer, detallada por The Verge, indica que cualquier persona que cambie su automóvil a combustión interna por uno eléctrico podrá optar a un
descuento “sustancial” y “profundo”, aunque no entregó montos específicos.
Un vocero cuya identidad no fue revelada, dijo en tanto que esos reembolsas buscan ser más altos y
duraderos que los actuales créditos fiscales de 7.500 dólares para vehículos eléctricos.Dentro del paquete de medidas, también destaca el hecho de proporcionar incentivos directos a los fabricantes para que
eliminen de manera gradual su producción de modelos impulsados por gasolina o diésel. Además, el político también busca crear
exenciones fiscales para que los propietarios instalen cargadores de vehículos eléctricos en sus hogares o departamentos a un costo mucho menor que el actual.
Por último, la estrategia también incluye entregar subsidios directos a los gobiernos locales para
expandir la red de estaciones de carga para vehículos eléctricos y así fomentar aún más el uso de este tipo de tecnologías.