La empresa británica Little Car Co se ha hecho conocida en el mundo de los fanáticos de los autos clásicos al construir impresionantes réplicas a escala, pero 100% operativas, de icónicos modelos de marcas tales como Aston Martin, Bugatti, BMW o Ferrari.
Según un artículo publicado por Bloomberg, la exitosa empresa opera gracias a un equipo de 25 expertos que trabajan en un antiguo hangar de aviones ubicado en el condado de Oxfordshire, Inglaterra.
Los modelos que nacen en estas instalaciones, indica el texto de prensa, son mucho más que simples juguetes de gente rica. Son más bien sofisticados autos que pueden ser conducidos y que se ubican algunos peldaños por sobre un kart convencional gracias a sus llamativas características.
La atención al detalle es increíble y los modelos reproducen hasta el más mínimo elemento de los autos originales, desde las ruedas hasta el interior. Lo único que cambia es el tren motriz, ya que estas réplicas son 100% eléctricas.
Los vehículos a escala incluyen asientos de cuero, faros LED, amortiguadores ajustables y diferentes modos de potencia para el motor eléctrico de 13 caballos de fuerza, además de un sistema de ??frenado regenerativo con frenos Brembo.
También hay teclas especiales que eliminan el limitador de velocidad, que está definido en los 48 km/h (30 mph).
El fundador de la compañía, Ben Hedley, le dijo a Bloomberg que la mayoría de las veces estos pequeños autos actúan como un complemento de los autos reales. Algo en lo que los propietarios pueden divertirse, ya que los autos reales son demasiado delicados para conducirlos con regularidad.
“Muchos coches hermosos del pasado se han vuelto demasiado valiosos para conducirlos todos los días. Si tiene un Aston Martin DB5 y lo saca para un viaje de ida y vuelta de 1.000 millas, acaba de rebajar 50 mil dólares del valor", explicó.
Respecto del valor de estas lujosas réplicas de autos clásicos, se indicó que estos tienen un precio similar al de un automóvil real de tamaño completo y de rango medio a lujoso.
El consuelo, indican, es que cuestan sólo una pequeña fracción de lo que cuestan los clásicos originales y en los cuales se inspiraron estos coches a escala. De ahí que no llame la atención que gran parte de sus compradores sean precisamente dueños de las versiones reales.
En la actualidad la empresa sólo fabrica dos modelos. Uno es la réplica del Bugatti Type 35 llamada Bugatti Baby II y cuyo precio oscila entre los 37 mil y 80 mil dólares dependiendo de cómo se personalice.
También hay un modelo exacto a escala del 66% del Aston Martin DB5 llamado DB5 Vantage Junior. Este ejemplar saldrá a la venta recién a finales de año a un precio inicial de 48 mil dólares.
Según indicaron sólo se construirán 1.059 ejemplares del Aston Martin y 500 unidades del Bugatti, de las cuales ya se han entregado los primeros 30 coches.
La compañía planea ahora introducir seis nuevos modelos en los próximos años. Ahora solo resta saber cuáles serán los clásicos elegidos.
