El Aston Martin DB5 es quizá el modelo más conocido de la lujosa marca británica gracias a su aparición en las películas del agente secreto 007, James Bond. Su fama mundial se cimentó luego que el coche fuera usado en la cinta Goldfinger de 1964 y Thunderball de 1965.
Para la producción de esas películas se utilizaron cuatro ejemplares de ese modelo. De ellos solo uno fue equipado con asientos eyectores, llantas destructoras, un escudo a prueba de balas, así como rociadores de aceite, humo y agua.
Lamentablemente para los coleccionistas y fanáticos del cine este auto desapareció en 1997 tras ser robado de un hangar privado en el aeropuerto de Boca Ratón en Florida, Estados Unidos.
(Aston Martin DB5 usado en la cinta "No time to die")
Ahora el diario The Telegraph informó que existen antecedentes que indicarían que el legendario auto de James Bond formaría parte de una colección de automóviles privados en algún lugar del Medio Oriente, según relató un investigador que asegura que el número de serie de la unidad hallada sería el mismo que el del auto de la película.
Este investigador, indican en el citado medio, sería uno de los colaboradores de un podcast titulado "El gran robo de autos de James Bond" que próximamente será presentado por Elizabeth Hurley.
Y es que esta unidad no deja de llamar la atención en la cultura pop, más aún cuando se estima que su valor actual rondaría los 24 millones de dólares, un monto no menor si se considera que la última vez que fue vendido alcanzó un precio de 275 mil dólares en 1986.
"Hay grandes coleccionistas de automóviles en esos países y tengo información de que el automóvil podría estar con uno de ellos”, dijo Christopher A Marinello de Art Recovery International al medio británico.
“Tengo la esperanza de que el poseedor se presente voluntariamente antes de que tenga que hacer un anuncio. Mi política es dar a los poseedores de objetos robados y saqueados todas las oportunidades para hacer lo correcto", añadió el investigador.
Marinello cree que el dueño actual del buscado ejemplar lo compró sin saber que fue robado de la colección del entusiasta de los recuerdos Anthony Pugliese III en 1997.
Por ahora, no hay mayor información al respecto pero se espera que muy pronto existan noticias que den luces sobre este caso. La idea, indicaron, es que se pueda lograr una devolución segura del automóvil a la colección de Pugliese.
