El fabricante de teléfonos inteligentes y productos electrónicos Xiaomi finalmente se sumó este miércoles a la competitiva industria automotriz, donde pretende desarrollar ejemplares 100% eléctricos y altamente tecnologizados.
Así quedó de manifiesto luego que la empresa inscribió con fecha 1 de septiembre la división Xiaomi Autos, según informó el director ejecutivo del grupo, Lei Jun, en su cuenta de Weibo.
La nueva empresa del conglomerado estará dotada de un capital de 10.000 millones de dólares para iniciar operaciones dijo además el alto ejecutivo.
Como muestra de la importancia que el grupo dará a esta nueva área, Lei Jun informó también que durante junio pasado se contrataron alrededor 500 ingenieros en China que tendrán la misión de poner en marcha la nueva área, sin fecha que se diera una fecha de inicio de operaciones.
Los vehículos con tecnologías más amigables con el medio ambiente (híbridos, eléctricos y de pila de combustible) están en auge en China, un país que se ubica a la vanguardia en este campo gracias, sobre todo, a una población ultraconectada y a una política de incentivos por parte de las autoridades.
Sin ir más lejos, China es el principal “campo de batalla” no solo para los productores locales, sino también para los grandes fabricantes mundiales de vehículos que buscan posicionarse en ese mercado. No son pocos los que incluso se han instalado con complejos industriales en ese país para dar cobertura a la demanda local.
Xiaomi no es la primera empresa china que se aventura en este sector. Varias firmas, como XPeng y Li Auto, que salió a bolsa el año pasado en Estados Unidos, también se han lanzado en el sector.
Xiaomi, el segundo productor mundial de teléfonos inteligentes, también fabrica tabletas con pantalla táctil, relojes conectados, auriculares y patinetas eléctricas, entre muchos otros artículos.
