BARCELONA.- Ni la intensa lluvia, ni los 9 grados de temperatura que hubo ayer miércoles en Barcelona impidieron que el cuadro catalán consiguiera una valiosa victoria sobre el Arsenal del atacante chileno Alexis Sánchez, por la vuelta de los octavos de final de la Champions League.
Nuevamente el tridente mágico del elenco culé, con Neymar, Luis Suárez y Lionel Messi, hizo vibrar a las más de 75 mil personas que llegaron a alentar al imponente Camp Nou y que vieron como el brasileño, uruguayo y argentino se dieron tiempo para entregar su mejor clase futbolística, esa que terminó por coronar la clasificación a los cuartos del torneo más importante de clubes de Europa.
Pero más allá del sólido triunfo del equipo del técnico Luis Enrique, hubo una serie de desconocidos detalles que marcaron la fría jornada que se vivió ayer miércoles en estadio del Barça.
Acá, los mejores entretelones que dejó el choque entre españoles e ingleses por la Liga de Campeones.
Riguroso control
Como era de esperar, el ingreso al estadio Camp Nou de Barcelona tuvo un riguroso control. En los dos accesos previos a las tribunas el público era controlado exhaustivamente, incluso a más de alguno no se les permitió entrar con mochila.
Aunque la diferencia con los partidos de alta convocatoria que se disputan en Chile, fue que en el perímetro que rodea al recinto deportivo no se vio ningún funcionario policial, salvo guardias privados.
Özil el más pifiado
Al momento en que se dio a conocer la formación titular del Arsenal hubo un solo jugador que recibió todas las pifias y abucheos.
Los gritos en contra fueron para el volante alemán Mesut Özil. Claramente, la parcialidad catalana no olvida su pasado en el Real Madrid, el archirrival del conjunto culé.
Siempre el Bombo
A diferencia de lo que ocurre en Chile, el bombo en los estadios de España está permitido para todo tipo de encuentro.
Para el choque de anoche no dejó de sonar durante todo el duelo acompañando los tradicionales cánticos de aliento para el conjunto blaugrana
"Messi es un Dios"
Primer balón que tocó Lionel Messi en el lance frente a los "Gunners" y el Camp Nou estalló.
Es que no hay dudas: el atacante argentino es la máxima figura del equipo catalán. Jugada que realiza, pelota que entrega o bien cuando marca a un rival todo termina con una estridente ovación. Basta con consultarle a un hincha el significado del rosarino para el club y la respuesta es categórica: "Para toda la fanaticada del Barça Messi es un Dios, no habrá nunca alguien mejor que él".
Ni café, ni maní…
El tradicional café o maní que se vende al interior de los recintos deportivos de Chile en Barcelona no existe.
Antes, durante y después del pleito no se vio a nadie vendiendo en las tribunas ni en las localidades populares. Todos los establecimientos de comida rápida están instalados afuera del estadio, salvo uno que otro en los accesos previos a las escalinatas hacia las aposentadurías.
Los reclamos de Alexis
Como siempre, a Alexis Sánchez se le vio movedizo por todo el sector de ataque, luchador en cada balón y protagonista con sus compañeros de ofensiva, tal como ocurrió en el pase que le propinó a Elneny para que éste marcara el empate parcial.
Pero también se mostró molesto en varios pasajes del partido contra el árbitro ruso Sergey Karasev. El tocopillano se ofuscó por una falta que le cometieron a los 22 minutos, pero el juez se hizo el desentendido.
Luego reaccionó por un golpe contra su compañero Özil que tampoco fue advertido por el juez. Y al término de la primera etapa Sánchez corrió hacia donde Karasev gesticulando por las faltas que había recibido y que no le fueron cobradas.
Ya en el complemento las pulsaciones del chileno bajaron bastante su intensidad y estuvo más sereno con el juez.
De pie ante el capitán
A los 71 minutos del compromiso Andrés Iniesta dejó el campo para dar lugar a Sergi Roberto. Al momento que se escuchó su nombre para la sustitución lo más de 75 mil espectadores que había en el Camp Nou se pusieron de pie y le brindaron un cerrado aplauso al capitán.
Hoy por hoy, el volante de 31 años es el jugador más respetado del equipo culé y que va camino para convertirse en una de las grandes leyendas del Barcelona.
"Que nos toque cualquiera"
Tras el término del pleito el defensa brasileño Dani Alves se mostró feliz por el resultado y dejó claro a qué equipo prefiere en la siguiente ronda.
"Estamos todos felices. Se le ganó a un gran cuadro, y ahora debemos ser fuertes para enfrentar el próximo rival. Sea quien sea el equipo, que nos toque cualquiera, pues para ser campeones hay que ganarles a todos", categórico el ex Sevilla.
