Allardyce y sus polémicos dichos.
AP
SANTIAGO.- Pasan las horas y crece la polémica luego que Sam Allardyce, técnico de la selección inglesa de fútbol, reconociera que participa en una red de corrupción en traspasos de la Premier League.
La revelación del DT se dio luego de caer en una cámara escondida, donde periodistas del The Telegraph se hicieron pasar por empresarios.
En Inglaterra asumen que en cualquier momento la Federación local notificara del despido del estratega, quien alcanzó a dirigir sólo un partido. Aparte de decir que formaba parte de esta red de corrupción, también criticó a su antecesor Roy Hodgson, a los príncipes británicos y a la FA.
Uno que pidió cautela y que primero se investigue todo antes de juzgarlo es Arsene Wenger. El técnico del Arsenal sostuvo este martes que "hay que dejar que Allardyce se defienda a si mismo. Sólo espero que pueda limpiar su nombre".
El francés llamó a la calma a los hinchas de los "Gunners" señalando que "yo hablo por mí y nuestros fans pueden dormir tranquilos de que no he hecho nada malo. Uno siempre quiere que la verdad salga a flote. Yo me preocupo por nuestras propias transferencias y no he sido contactado por nadie".
Cabe recordar que Allardyce reconoció que acepta viajar a Singapur y Hong Kong como embajador de la firma de los empresarios ficticios por 400.000 libras (519.000 dólares, 461,000 euros).
Pero además, explica como sortear la prohibición, desde el año pasado, de que terceras partes, casi siempre empresas, sean propietarias de los derechos de los jugadores, en vez de los clubes. Allardyce se burla de la manera de hablar de Hodgson, objeto frecuente de mofa, y dice que su ayudante en la Euro-2016, Gary Neville, tenía que haberse "sentado y cerrado la boca", en alusión a sus constanstes salidas a la banda a dar instrucciones.
El nuevo técnico atribuye el fracaso de Inglaterra en el torneo a que sus jugadores tienen "una barrera psicológica". También critica que el príncipe Guillermo, presidente honorario de la federación inglesa (FA), no asistiese, la semana pasada, a la presentación del logo de la Euro-2020, cuyas semifinales y final se disputaran en Londres.
Allardyce sostiene que la FA "gastó estupidamente 870 millones de libras" en la reconstrucción del estadio de Wembley. En un comunicado enviado al diario, la FA respondió: "hemos pedido a The Daily Telegraph que nos suministre todos los hechos en relación a este asunto".
