Una de las jugadas más descatadas del partido. Garcés tapando un clave mano a mano a Fuenzalida.
Aton
SANTIAGO.- Cuando se conoció de la grave lesión de Justo Villar en Colo Colo, de inmediato el murmullo comenzó a expandirse. Paulo Garcés debería volver a San Carlos de Apoquindo para enfrentar al equipo donde se formó: la Universidad Católica.
El comentario era obligado. El golero tendría un "partido aparte" en la precordillera. Y vaya que lo tuvo. Fue fundamental y uno de los jugadores clave en el empate final que consiguió el Cacique ante la UC.
Sí, porque cuando la banda de Guede pasó apremio fue el golero el que la salvó. Se cuentan dos tapadas espectaculares. Primero a los 33' mano a mano le atajó a José Pedro Fuenzalida, quien remató abajo, pero se encontró con la soberbia reacción del arquero que puso los guantes casi a ras de pasto para atrapar.
La otra fue felina, y respondiendo al apodo de "Halcón". Remate de Católica, balón que pega en la cabeza de un defensa y que parecía colarse en el ángulo más alto del vertical derecho de Garcés. Pero no, el portero voló de manera plástica para llegar arriba y dejar el grito gol sólo en las gargantas cruzadas.
Fue figura Garcés, lo mismo que Martín Rodríguez, quien fue dueño de la banda izquierda de los albos. Ahí le ganó todo el primer tiempo a Cristián Álvarez, quien incluso terminó reemplazado. Además anotó la apertura de la cuenta y fue siempre un peligro para la defensa de los locales.
Otro que jugó quizás su mejor partido desde su arribo a Macul fue Octavio Rivero. Anotó el segundo tanto de Colo Colo y a los centrales de la UC les costó demasiado tomarles la marca.
Por el otro lado, en la UC el punto más alto fue Nicolás Castillo. Solo se las ingenió para complicar en el área rival, además de tener la frialdad para marcar el empate vía lanzamiento penal.
Maripán también tuvo un buen pleito, aunque a su lado no lo ayudó la mejor compañía. Lanaro estuvo bajo y no sólo por la expulsión, también porque fue poco dúctil en la salida y le costó mucho con Rivero.
Poco se vio también César Fuentes, reemplazado en el segundo tiempo. Buonanotte presentó chispazos y velocidad.
Al final un partido muy táctico donde no hubo un grupo grande de individualidades que marcar.
