El representante nacional admitió que "21 minutos es mucho", pero asegura que igual peleará la punta.
El Mercurio
SAN JUAN.- El Rally Dakar ya está en su recta final. Los competidores han sentido la dureza de los caminos y la intensidad del clima durante toda la carrera, por lo que ya están dando sus últimos esfuerzos para poder llegar de la mejor manera a la meta este sábado en Buenos Aires.
Y uno de los pilotos que sigue luchando, ya a dos etapas para que culmine la competencia es Ignacio Casale. El candidato chileno en los quads está segundo en la general, a 21 minutos del ruso Sergey Karyakin, por lo que sabe que la pelea será intensa en los kilómetros finales de carrera.
"Recortarle 21 minutos a Sergey en una etapa va a ser muy difícil, pero voy a salir a pelear la punta. Aunque hay que tener los pies en la tierra, porque 21 minutos es mucho. Voy a salir a correr, pero sin hacer tonteras porque un error me puede dejar fuera de la carrera el último día", analizó el "Perro".
Sin embargo, a Casale se le ve agotado. La carrera ha sido extenuante y el chileno ya siente el cansancio. De hecho, este jueves llegó muy agotado al campamento ubicado en la localidad de San Juan, donde aseguró que las fuertes temperaturas afectaron su desempeño en la presente jornada.
"Hoy fue la etapa más difícil para mí de este Dakar. Muy larga y con mucho calor. Anduve muy fuerte peleando con Sergey hasta más o menos la mitad de la etapa y de ahí en adelante comenzó un calor muy fuerte que me deshidrató un poco y no me sentí cómodo para seguir atacando", explicó.
"Pero siento que hice una buena especial, le recorté tiempo a Dutrie y estoy segundo en la general, lo que me deja bastante conforme porque hace dos días estaba cuarto. Vamos por buen camino, ojalá terminar el Dakar. Está muy difícil, mañana se viene un día largo también y espero poder salir lo más fresco posible para atacar y recortar el mayor tiempo posible", complementó.
Ahora Casale tendrá que reponerse para salir a afrontar la penúltima etapa del Dakar, la que jugará un papel crucial para los pilotos puesto que es la última con un kilometraje cronometrado considerable antes del término de la carrera. El "Perro" jugará sus últimas cartas y espera jugarlas de la mejor manera posible.
