SANTIAGO.- No importó la polémica con Fabián Orellana. Menos las repercusiones que salieron de ella. El Celta de Vigo olvidó todo y obtuvo un valiosísimo triunfo ante el Real Madrid, por los cuartos de final de la Copa del Rey.
El equipo que dirige Eduardo Berizzo, con los chilenos Marcelo Díaz y Pedro Pablo Hernández a lo largo de todo el partido, se impuso por 2-1 en el Santiago Bernabéu y quedó a un paso de avanzar en el certamen hispano.
La hazaña del Celta fue grande. Pese a que en un comienzo tuvo problemas en la parte posterior y no podía recuperar el esférico en el medio campo - de hecho, Díaz y Hernández fueron amonestados por luchar balones en la media cancha-, finalmente el planteamiento del "Toto" dio resultados y poco a poco se volvieron protagonistas del encuentro.
Aunque los resultados se verían en la segunda parte. A los 64 minutos, Iago Aspas quedó sólo ante el meta Francisco Casilla tras un mal despeje de Marcelo, y definió sin problemas para abrir la cuenta.
No obstante, el cuadro de la capital española reaccionaría rápidamente y mediante el mismo jugador que cometió el error en el gol del Celta. A los 69', Marcelo disparó cruzado y anotó la paridad.
Era un encuentro electrizante, con idas y vueltas, lo que quedó demostrado sólo un minuto después del empate del Real. Jonny quedó mano a mano con Casilla y puso el 2-1 definitivo al minuto 70.
El resultado dejó al cuadro de Vigo con grandes chances de avanzar a la ronda de los cuatro mejores de la Copa del Rey. Todo se definirá el próximo miércoles, cuando reciban a los "merengues" en su estadio, en Balaídos.