Baeza siempre estuvo atento y cerca de Buonanotte.
Aton
SANTIAGO.- Se jugaban tres minutos y en el estadio Monumental se escuchaban pifias. La afición de Colo Colo le reprochaba los reclamos de Diego Buonanotte al árbitro del cotejo Carlos Ulloa. El volante creativo de Universidad Católica se quejaba de una falta de Claudio Baeza.
Sería la primera jugada de roce entre ambos. Y así se repitió todo el encuentro. Este duelo disputado en el mediocampo lo ganó el Cacique, anulando por completo al "enano", quien nunca pudo entrar en juego.
Finalmente Buonanotte sería reemplazado en el segundo tiempo y esta vez con pifias ensordecedoras de fondo. Y del otro lado, Baeza se convertía en la estrategia clave en el triunfo del conjunto albo ante los cruzados, que ahora los tiene en la cima del Torneo de Clausura.
Tras la ausencia por lesión de Esteban Pavez, Pablo Guede le dio al ex seleccionado Sub 20 la misión de bloquear a uno de los jugadores más peligrosos del cuadro de Mario Salas, quien además fue la figura en el bicampeonato.
La estrategia daba resultado y el ex River Plate se dedicó a discutir y no fue gravitante. Pese a esto, Guede nunca estuvo tranquilo, y constantemente dialogaba con el jugador para darle indicaciones.
Incluso, en los primeros momentos del partido se enfadó exaltadamente con su pupilo cuando éste erró un pase que terminó con el balón fuera de la cancha, y cada vez que Buonanotte aparecía libre, aunque a muchos metros de distancia del arco de Justo Villar, el técnico argentino conversaba con su ayudante con evidente molestia.
Otra tarea que tenía el nacido en la cantera colocolina era presionar a Santiago Silva cuando éste salía de la zona de ataque para intentar generar juego, misma tarea que muchas veces hizo Nicolás Castillo el año pasado.
Pero el "Tanque" tampoco tuvo un buen cometido en el conjunto de San Carlos de Apoquindo. Y a los 30 minutos, en un momento de impotencia, le entró con la pierna muy fuerte al propio Baeza. El Cacique quedaba tendido en el suelo y Guede estallaba en rabia porque el juez Carlos Ulloa sólo advirtió al atacante, sin sacarle amarilla.
Fue tanta la molestia del DT del conjunto de Pedrero, que incluso fue a discutir con el cuarto árbitro, Patricio Polic, quien después corrió hasta el banco de suplentes para advertirle que se podía ir expulsado.
En el segundo tiempo, el "serrucho" fue el primer pase limpio en la salida de los albos. Cada triangulación bien hecha por el jugador era aplaudida por los fanáticos. Sin embargo seguía sin perder de vista al pequeño mediocampista cruzado, quien ya vivía una nefasta tarde en Macul e incluso recibió una amarilla a los 52'.
Finalizado el partido, Baeza era escogido el jugador de la cancha. Guede, en cambio, se fue rápido a los camarines; la estrategia dio frutos y Colo Colo es puntero.