El capitán reprochó a los hinchas por las silbatinas.
AFP
SANTIAGO.- Se enojó el capitán. Claudio Bravo no se tomó nada de bien que el público presente en el estadio Monumental comenzar a pifiar el rendimiento del equipo en el segundo tiempo.
Se jugaban los 71 minutos del partido, Venezuela ya había descontado y el capitán no soportó que los hinchas silbaran a la "Roja".
Bravo se dio vuelta y le reprochó a los asistentes gritándoles "que silban", llevándose la mano a la boca.
Tras esto, la barra reaccionó y volvió a alentar fuertemente a la selección nacional, que no ha logrado repetir el segundo tiempo el buen rendimiento del primero.
Cabe recordar que las diferencias entre el público y los jugadores de la "Roja" no son nuevos.
En muchos otros partidos de local el mismo Bravo, Jorge Valdivia y otros referentes se han manifestado en contra de los reproches de la hinchada.