Con solo 20 años el alemán Alexander Zverev ganó el título de Roma, su primer Masters 1000 desde que es profesional.
AFP
SANTIAGO.- Tocó el cielo. Así se podría calificar el notable triunfo que logró el joven tenista alemán Alexander Zverev tras vencer al experimentado serbio Novak Djokovic en la final del Masters 1000 de Roma.
Con solo 20 años, el germano de ascendencia rusa doblegó al actual dos del planeta por parciales de 6-4 y 6-3, resultado que le permitió este lunes escalar hasta el puesto 10 del ranking de la ATP.
"Sascha", quien es hijo de un ex tenista de la desaparecida Unión Soviética y que actualmente lo entrena, comenzó su carrera profesional en 2013, mismo año que perdió la final de Roland Garros juniors ante el chileno Christian Garín.
Esa mañana del 8 de junio el iquiqueño se impuso por un claro 6-4 y 6-1, aunque ahora es el alemán quien ha logrado un notable crecimiento, pues con el trofeo que ganó en Roma, su pirmer Masters 1000, sumó su cuarto título ATP e ingresó al Top Ten, muy diferente al momento que vive el nacional, quien solo ha conquistado challengers y es el 200 del planeta.
El ascendente camino de Zverev se produjo al terminar la temporada 2015 donde quedó en el casillero 81º del mundo con solo 18 años, lo que le permitió recibir el premio al jugador más joven en el Top 100.
Luego, el 17 de octubre de 2016 entró al top 20 con apenas 19 años y 5 meses reafirmando su gran futuro y que hoy ya mete miedo a los grandes tenistas del circuito.
Sobre el presente que está viviendo, el nacido en Hamburgo manifestó que "recuerdo que desde niño soñé con llegar a ganar un campeonato grande, pensé que a los 20 años iba a ganar los cuatro Grand Slam, pero a los 16 años, realmente me di cuenta de lo difícil que es llegar a lo alto".
Respecto al haber vencido a Djokovic, dijo que "mi hermano es de su edad y entrenó varias veces con él. Jugué muy bien con mi servicio y sin errores. Me felicitó y yo le deseé suerte en París".
En cuanto a las proyecciones, el promisorio jugador alemán sostuvo que "estar entre los diez primeros es increíble, pero lo más duro será tratar de mantenerse ahí, con jugadores talentosos como David Goffin (belga) y otros que quieren entrar y figurar".