Los medios quedaron conformes.
Pantallazo Olé
SANTIAGO.- Lo alabalron en redes sociales y ahora también la prensa. El triunfal debut de Jorge Sampaoli en la banca de Argentina fue muy bien valorado por los medios trasandinos.
Sobre todo porque se le ganó a Brasil, el clásico rival, y que venía de una impresionante racha de nueve partidos consecutivos con sólo victorias.
"Sampa trae suerte". Así titula Olé su crónica del partido disputado en Melbourne. Además, resaltan que hoy comenzó "una era que tendrá el sello de haber arrancado con un triunfo en el que hubo tantas señales para aferrarse a la esperanza como para perseguirse con la frustraciones pasadas".
El mismo medio destaca otro aspecto, uno más futbolístico. "Argentina ya no juega sólo para Messi. La Selección, en el primer partido de Sampaoli, no dependió exclusivamente de lo que produjo Messi en ofensiva. Mostró otras variantes para atacar".
Pero también destaca un aspecto negativo. "Problemas de fondo. El método Sampaoli sacrifica seguridades defensivas para estar más cerca del gol. El sacrificio, vamos, se traduce en espacios que, por diseño, le ofrece al adversario. Esta es la transición más importante, porque es radical, de lo que fue la realidad de los ciclos anteriores de la Selección. De Bielsa para acá, ningún entrenador argentino utilizó la línea de tres como sistema defensivo principal y adaptarse a él demandará un tiempo en el que el equipo tendrá que convivir con el error mientras el técnico va encontrando los jugadores indicados y éstos se acostumbran al nuevo escenario".
Por su parte, Toda Pasión valora que "la Selección argentina mostró otra personalidad y le ganó a Brasil en el debut de Jorge Sampaoli". Y profundiza esta idea. "Argentina mostró otra personalidad. Mucha más ambición. Con apenas un puñado de entrenamientos encima, Jorge Sampaoli logró plasmar algunas de sus ideas en la Selección y hoy le ganó 1 a 0 a Brasil en un amistoso en Melbourne, Australia, ante más de 90 mil personas. El único gol lo hizo Gabriel Mercado".
A su vez, La Nación comentó que "no se puede hacer florecer una idea con cuatro entrenamientos. Sí, en todo caso, implantar la semilla y empezar a regar. En un estadio colosal, tan grande como la historia de uno de los mayores (¿o el mayor?) clásicos del mundo, la selección argentina intentó desplegar los primeros brotes del cambio de estilo que propone Jorge Sampaoli, su nuevo entrenador. Incluso tal vez ni siquiera se trate de un giro de identidad, sino más de la implantación de una, después de los volantazos sin sentido que se observaron en la brevísima era Bauza".