KAZÁN.- Pitazo final. Después de 120 minutos, Chile y Portugal no pueden definir al finalista de la Copa Confederaciones. El drama se traslada a los penales.
Los jugadores de la "Roja" están extenuados, pero saben que la posibilidad de pasar a la definición por el título está cerca, por eso todos se abrazan felicitándose por el partido realizado en la cancha del Kazán Arena de Rusia.
Y mientras eso pasa, Claudio Bravo va abrazando uno a uno a sus compañeros. El capitán asume su rol y les da el empujón anímico para lo que queda, lo más importante.
Luego el meta del Manchester City se acerca a Johnny Herrera y Cristopher Toselli. La conversación comienza y junto a ellos está el preparados de Arqueros de la selección, Alex Whiteley.
El diálogo se hace en un círculo y el capitán mira atento la papeleta que le muestran. Ella, según sus propias palabras, había información del rival para la tanda de penales.
Mientras eso pasaba en otro sector Juan Antonio Pizzi le daba un fuerte abrazo a Gary Medel. El "Pitbull" había terminado el partido con algunos molestias y el DT le agradecía su esfuerzo hasta el final.
Luego viene la arenga. Todo se reúnen y Bravo de rodillas toma la palabra. También habla Medel. El resto escucha atentamente. Era la hora de la verdad y se juramentaban ganar.
Tras esos minutos, el meta chileno emprende rumbo al arco. Luego escucha las indicaciones del árbitro y posteriormente camina hacia la esquina. Chile arranca.
Vidal camina hacia el arco y luego acelera el paso hasta llegar al balón. Lo acomoda, apunta y dispara. Golazo y lo celebra con todo. Corriendo vuelve a abrazar a sus compañeros.
Es la hora de Bravo. El meta se coloca bajo los tres palos y con una gran tapada contiene el primer remate a Ricardo Quaresma. Al centro todos los celebran. Vidal y Medel lo hacen con un "pechazo".
Después viene Charles Aránguiz y en su calidad de experto, el "Príncipe" no falla. Otra vez el "Rey" y el "Pitbull" lideran los festejos en la mitad de la cancha.
Más tarde Bravo repite y ahora contiene el disparo de Joao Moutinho. El meta mira al cielo, aprieta su puño y se lo dedica a Vidal que es el primero en saltar a celebrar.
Es el turno de Alexis. El goleador histórico toma el balón, lo domina y luego lo acomoda. Remata y gol. Loco por lo que hacía Chile, es el volante del Bayern quien lo va a encontrar para felicitarlo. Fuerte abrazo.
Portugal tiene toda la presión. Si falla pierde. Y así ocurre. Otra vez el capitán contiene, en esta ocasión el remate de Nani. Algarabía total de la "Roja".
Vidal es el primero en correr. Ya no puede más de alegría y se abraza con quien encuentre en el camino. Al costado, Pizzi y su cuerpo técnico no para de festejar y de felicitarse.
Al otro lado de la cancha ya todos llegan a celebrar con Bravo. Se tiran encima de él, lo abrazan y luego lo levantan entre todos. La alegría era total.
Los festejos estaban desatados y en gran parte gracias al espectacular trabajo del portero del City.
Después de varios minutos, la situación se calma. El pase a la final ya estaba en manos de Chile. El cierre perfecto para una noche llena de tensiones y emociones.