Siguen sin enmendar el rumbo los franjeados.
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SANTIAGO.- En el mismo día en que el delantero Roberto Gutiérrez se destapó en Palestino anotando un doblete y quedando como exclusivo goleador del Torneo de Transición, Universidad Católica otra vez dio muestra de que está entrando en una crisis.
El elenco dirigido por Mario Salas visitaba a Unión Española en el duelo más atractivo de la jornada sabatina de la segunda fecha y que aparecía como ideal para dejar atrás la sequía goleadora que la afecta. Además, presentaba el retorno de su figura, el argentino Diego Buonanotte.
Pero nada de eso. Nuevamente mostró un juego abúlico y cayó por la cuenta mínima en el estadio Santa Laura ante una efectiva Unión de Martín Palermo, que dio el golpe en el momento preciso.
Fue en el inicio del segundo tiempo, tras un primer lapso en el que ambos conjuntos hicieron poco por el espectáculo, cuando los hispanos lograron la ventaja que a la postre sería definitiva.
Cristopher Toselli derribó claramente en el área a César Pinares y el talentoso volante cobró derechos de autor: Se puso desde los 12 pasos y con un magnífico picotón a lo "Panenka" vulneró la resistencia del arco cruzado para sellar el 1-0.
El resto del compromiso, Católica intentó con más pundonor que ideas ir por la igualdad. Y nuevamente sufrió por el aislamiento del atacante Santiago Silva, quien otra vez no tuvo ninguna chance clara y no le llegó ninguna pelota con ventaja. Con el correr de los minutos, la desesperación se adueñó de los franjeados.
Además del toque anodino y sin profundidad, también hubo descontrol por la impotencia de no poder llegar con claridad al arco custodiado por Cristian Guerra.
Así a los 69', el defensa Benjamín Kuscevic se fue expulsado por doble amarilla tras detener con falta un avance de Israel Poblete y posteriormente, a los 85 minutos, el volante argentino Luciano Aued también vio la roja de parte del árbitro Carlos Ulloa.
Eso sí, antes de la expulsión del trasandino, se abrió una ventana para los cruzados, cuando a los 78' el volante Angelo Pizzorno también tuvo que irse tempranamente a las duchas por una descomunal patada sobre Carlos Espinosa.
Pero solo quedo en esó. La siesta de Católica definitivamente duró hasta el pitazo final del juez Ulloa y de esta manera en San Carlos comienzan a entrar en complicado momento y quedan rezagados en la tabla con apenas un punto en dos partidos.
En la próxima jornada, la UC recibirá a Everton en la precordillera con la obligación de sumar una victoria para darle tranquilidad a Salas y a sus hinchas, mientras que Unión tendrá una dura visita ante O'Higgins en Rancagua.