SANTIAGO.- Una vez más el rugby da la vuelta al mundo con sus emblemáticas sanciones. En esta oportunidad tras suspender por 10 años a un joven deportista.
La acción ocurrió en la final Sub 19 en la que se enfrentaron Maitland Blacks y Newcastle Wanderers, donde todo marchaba bien hasta que Mark Meafua perdió la cabeza.
El joven rugbista australiano reaccionó de una horrible manera luego que el árbitro lo expulsara por golpear a un rival con el codo.
Cuando el juez, de 19 años, le daba las explicaciones por su decisión, el deportista de los Maitland le lanzó un golpe de puño, el que le dio en el cuello al colegiado y por poco lo lanza al piso.
A raíz de esto, el rugbista australiano fue juzgado por la audiencia judicial ante la que se declaró culpable del violento acto. En tanto, el comité local decidió castigarlo con 10 años sin jugar.