La "Marea Roja" se hizo sentir.
José Alvujar, El Mercurio
SANTIAGO.- La presión estaba sobre Chile. Lograr el triunfo era una obligación para que el sueño del Mundial de Rusia 2018 siguiera vivo. Lo sabían los jugadores de la "Roja" y también la hinchada.
Por eso, y a diferencia de la mayoría de las ocasiones anteriores, las más de 40 mil personas que llegaron al Monumental para ver el duelo ante Ecuador alentaron desde el primer minuto a los bicampeones de América.
El bombo se notó desde la previa. Su incomparable sonido encendió los ánimos de los forofos y guió los cánticos de aliento. El ¡vamos chilenos! y el ¡dale bicampeón! se escuchó más fuerte que nunca. Todo acompañado de las banderas de Farkas que tiñeron de color el estadio.
Era una verdadera fiesta y los jugadores lo notaban ya en el calentamiento. Bravo aplaudía a las tribunas y Vidal miraba atento. Valdivia sonreía y Medel conversaba con Jara destacando lo que ocurría en las gradas. Luego regresaban bajo una ovación al vestuario.
Más tarde la notable interpretación del himno nacional generaba otra vez el fuerte aplauso de los jugadores de la "Roja", que a esa altura ya sentían con creces el aliento de una hinchada a la que muchas veces criticaron por su falta de apoyo.
Y esas muestras de aliento no cesaron. El bombo jamás paró de sonar y los cánticos se repetían una y otra vez. Más aún tras el 1-0 de Eduardo Vargas. La reconciliación entre el público y los seleccionados estaba sellada.
Ni siquiera cuando llegó el empate pararon los cánticos. Y para que decir tras el 2-1 de Alexis Sánchez. Ese momento el estadio cantó con más fuerza y cuando se jugaban los minutos finales la entonación del himno nacional selló una noche perfecta.
"Hoy se sintió diferente. Volvimos a la esencia nuestra con un estadio con un espíritu increíble que nos contagió desde que llegamos", alabó el capitán Claudio Bravo.
Jorge Valdivia se sumó a los elogios. "Hay que agradecer el apoyo de la gente. Nos apoyaron durante todo el partido y eso lo sentimos desde el primer minuto", indicó una de las figuras del partido.
Después de varios encuentros con críticas hacia la gente, en la ocasión más importante el público despertó y aleonó a una "Roja" que respondió con creces al aliento de su hinchada.