SANTIAGO.- Quiere limpiar completamente su imagen. Paolo Guerrero celebra luego que la FIFA le redujera la sanción tras dar positivo en control antidopaje. Pero él quiere más.
El delantero peruano recibió ayer la notificación que su castigo se redujo de un año a sólo seis meses, por lo que está disponible para disputar el Mundial de Rusia 2018.
Pese a esto, la figura de la selección incaica igual acudiría ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo, el TAS. ¿Para qué? Busca una nueva rebaja o mejor aún, quedar limpio de todo y sin sanción.
Pero esto podría ser un arma de doble filo para el "Deprepador". ¿Por qué? En Perú advierten que la apuesta podría ser muy arriesgada.
Y es que la apelación al TAS podría terminar en su objetivo, quedar limpio de todo o conseguir una nueva rebaja. Pero también daría paso a que la WADA (Agencia Mundial Antidopaje) se involucre.
Así, el TAS reiniciaría toda la investigación desde cero y podría sumar antecedentes que podrían perjudicar a Guerrero.
Lo peor sería que determinaran aumentar la sanción a un año, o incluso más. Ahora todo quedó en manos del delantero peruano.
