SANTIAGO.- Lejos quedaron sus brillantes actuaciones en la Premier League junto al Arsenal. El dinero y los lujos pasaron al olvido. La vida dio un vuelco total para Emmanuel Eboué. Ahora atraviesa por un verdadero infierno.
El ex lateral y figura de los "Gunners" se encuentra en la banca rota e incluso ha pensado en el suicidio. Todo tras una serie de eventos desafortunados que lo bajaron del cielo a la tierra.
Según reveló en diálogo con The Mirror, el marfileño perdió prácticamente todos sus bienes materiales tras divorciarse de su ex esposa, y por realizar diversos malos negocios en los que derrochó grandes cantidades de dinero.
"No puedo pagar el dinero para seguir teniendo abogado. Estoy en la casa pero tengo miedo, porque no sé a qué hora llegará la policía. A veces apago las luces porque no quiero que la gente sepa que estoy adentro. Puse todo detrás de la puerta", confesó el otrora defensor.
Sus líos con la ley inglesa se deben a que ya pasó el límite para que le entregara otra propiedad a su ex mujer. "Es mi propia casa. Sufrí para comprar mi casa. Ahora estoy asustado. No voy a vender mi ropa ni a vender lo que tengo. Lucharé hasta el final porque no es justo", añadió.
La debacle de Eboué comenzó el año pasado, cuando la FIFA lo sancionó con doce meses sin jugar por problemas con su ex representante. Estaba a punto de firmar un contrato con el Sunderland. Justo después se le diagnosticó una enfermedad mental por la que debió retirarse del deporte. Ahí comenzaron los impulsos por quitarse la vida.
"Quiero que Dios me ayude. Solo él puede ayudar a eliminar estos pensamientos de mi mente", sostuvo el africano.
Ahora, el también ex jugador de Galatasaray duerme en el piso del departamento de un amigo y debe ingeniárselas para no ser atrapado por la justicia. Ruega por la ayuda de alguno de sus antiguos equipos.
"Acepto la ayuda de cualquier parte, pero si mi club anterior en el que estuve quiere ayudarme, estaría muy, muy feliz. Son bienvenidos. Tal vez podría ir y trabajar allí para ayudar a los jugadores jóvenes. Los fanáticos en Arsenal, incluso ahora todavía me aman", concluyó.