La "gracia" de Thompson no le hizo ninguna gracia al árbitro.
AP
En la victoria de Memphis sobre Cleveland por 113 a 109 hubo una jugada que llamó tanto la atención como las clavadas de Ja Morant o un pase entre las piernas que hizo Kevin Love. El protagonista fue Tristan Thompson, aunque no por una jugada de lujo.
Cuando finalizaba el tercer cuarto, el pívot de los Cavaliers fue a la línea de tiros libres. Mientras esperaba que el árbitro le pasase el balón, Jae Crowder paso por su lado y Thompson le tocó el trasero. Segunda falta técnica y afuera.
"Sólo es un poco de espíritu competitivo. Es posible que lo hayan visto de otra manera, probablemente hayan olvidado que fuimos compañeros de equipo durante media temporada. Es como jugar con otro compañero más… Llamaré a la Asociación de Jugadores mañana para apelar. Supongo que ya no puedes hablar con tus antiguos compañeros de equipo", se defendió Thompson.
Jae Crowder, que fue compañero del canadiense en Cleveland al inicio de la temporada 2017/18, prefirió no hacerse mayor problema. "Perro ladrador, poco mordedor. Lo dejaremos pasar", comentó.
La NBA, en tanto, publicó un comunicado en el que el juez Kevin Mauer dio sus razones para expulsar a Thompson y no sancionar a Crowder.
"Thompson recibió la técnica por la burla física, darle una palmada en el trasero a Jae Crowder. Crowder no dijo una palabra durante ese incidente ni hizo nada antideportivo que hubiera justificado su segunda falta técnica", sentenció.
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