Robinho enfrentado a Vidal en un Milán-Juventus.
AFP
Robinho tuvo una fulgurante aparición en el Santos y Brasil veía en él a un digno sucesor de Pelé. El joven atacante partió al Real Madrid con la meta de ser el mejor del mundo, pero en la capital española mostró solo destellos. Nunca pudo despegar. Su carrera, en general, ha estado por debajo de las expectativas.
"Sé que algunos esperaban que ganase el Balón de Oro. Cuando Pelé habla sobre ti, la gente escucha. Hicieron esas comparaciones pero no hay un nuevo Pelé, ni ahora ni nunca", le comentó a Marca.
En 2008, Robinho tenía decidido irse al Chelsea. Lo había pedido expresamente su compatriota Luiz Felipe Scolari. La negociación entre los clubes estaba muy avanzada, pero al Madrid le molestó que el elenco inglés comenzase a vender camisetas del futbolista antes de sellar la transferencia.
Con la operación caída, apareció en escena el Manchester City. Los ciudadanos recién comenzaban a armar el millonario proyecto que hoy los tiene entre los mejores del mundo y necesitaban un nombre potente.
Le prometieron traer a estrellas como Kaká y Lionel Messi. Finalmente, eso no ocurrió y el City fue el único club de la carrera de Robinho en el que no consiguió títulos. En Manchester se le recuerda más por su vida extrafutbolística. Le encantaba ir a las discoteques de la ciudad.
"Me gustaba divertirme. ¡Pero los ingleses salían más que los brasileños! Joe Hart salía siempre, Micah Richards y Shaun Wright-Phillips lo mismo. Pero cuando salíamos los brasileños siempre nos pillaban", expresó.
Luego de su paso por Inglaterra, volvió al Santos, pero tendría una nueva oportunidad en un grande de Europa: el Milan. Recuerda que Zlatan Ibrahimovic solía decir que él convenció a la dirigencia rossonera de ficharlo. Sin embargo, no fue la única imagen del sueco que le quedó grabada en la memoria.
"En un entrenamiento le dio por retar a Gattuso a una pelea de jiu-jitsu. Ahí tenías a este feroz defensor haciendo artes marciales contra Zlatan, que es cinturón negro. ¿Quién ganó? Zlatan siempre gana", declaró.
Robinho, que le hizo varios goles a Chile jugando por Brasil, hoy tiene 36 años y juega en el IstanbulBasaksehir FK. Partió a Turquía tras ser condenado por un caso de violación en Italia.
