Biles demostró toda su fuerza y habilidad.
Reuters
La gimnasta Simone Biles quería seguir acrecentando su leyenda en los Juegos de Tokio. Con solo 23 años, ya tiene cinco medallas olímpicas y 26 en campeonatos mundiales, 19 de ellas de oro. Sin embargo, el coronavirus torció sus planes. Está confinada en su casa y desde allí lanzó un reto que ha dejado al mundo boquiabierto.
La estadounidense hizo la posición invertida para intentar sacarse los pantalones. No fue fácil, pero lo logró ayudándose con la planta de los pies y demostrando una impresionante capacidad de resistencia en un par de minutos.
Así Biles busca pasar la pena que le produjo la cancelación de la cita de los anillos y de la que se enteró en pleno entrenamiento. "Estaba en el gimnasio y cuando fui al vestuario entre rotaciones vi el mensaje. No sabía qué sentir. Me senté y lloré, pero en definitiva fue la mejor decisión. Tenemos que asegurarnos que todos en Estados Unidos y en todo el mundo estén sanos y fuera de peligro. Fue duro, pero está bien", le dijo a la NBC.
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