El Inter se medía ante la Roma en un partido que era vital: Si ganaba, quedaba solo a tres de la Juventus, que debe jugar mañana un complicado partido ante Lazio.
Sin embargo, los lombardos no supieron aprovechar la instancia y apenas rescataron un sufrido empate 2-2 en el Estadio Olímpico.
Alexis Sánchez volvió a ser titular y aunque tuvo poco contacto con el balón, lanzó el tiro de esquina que terminó con la apertura de la cuenta.
Al chileno se le vio algo cansado y menos ágil que lo habitual, pero aún así se las arregló para esporádicamente encarar a la defensa rival, que lo supo custodiar bien.
En el trámite del duelo, todo comenzaba bien para el Inter. A los 14' Alexis tiraba un córner con mucha comba y Stefan De Vrij puso el primero. En eso, los neroazzurros mejoraron, tenían la pelota, pero no podían auemntar.
El primer tiempo se iba y Leonardo Spinazzola logró empatarlo. Un balde de agua fría para los dirigidos por Antonio Conte.
En el complemento, la Roma salió a gran ritmo y Henrikh Mkhitaryan marcó a los 56' para darlo vuelta. El Inter no le encontraba la vuelta al partido y ni con cuatro cambios, entre ellos Romelu Lukaku, podía generar ocasiones.
Hasta que llegó el minuto 86'. Spinazzola cometió un penal increíble a Victor Moses y Lukaku puso el empate. Una pena máxima caída del cielo.
En los últimos minutos el Inter intentó someter a la Roma, pero el marcador no se alteró. Opaca igualdad que no le sirve a ninguno. Los de Conte llegan a 72 puntos, cinco menos que la Juventus.
