El Barcelona está sumido en una profunda crisis dirigencial. La renuncia de Josep María Bartomeu a la presidencia no parece aquietar del todo las aguas.
Una de las principales críticas al ex timonel fue la gestión de fichajes. Javier Bordas, que llegó al club en 2010 con Sandro Rosell y se fue recientemente con Bartomeu, contó que se desecharon grandes jugadores. Uno de ellos pudo llegar en lugar de Claudio Bravo al elenco culé.
"Si creía que podía ayudar, me movía. No hice nada por mi cuenta. Cuando moví lo de (Thibaut) Courtois lo hablé antes con Rosell. Me dijo que si podíamos hacer algo, lo hacíamos. Puse a disposición traer a Courtois (por entonces en el Atlético de Madrid) y Zubi (Andoni Zubizarreta, director deportivo), con buen criterio, quiso traer a Ter Stegen y acertamos porque es el mejor del mundo. Pero luego llegó Unzué y decidimos traer a otro, a (Claudio) Bravo, un gran portero. Pero quizás pudimos tener a Courtois con Ter Stegen juntos", dijo en Mundo Deportivo.
Hoy Europa alucina con Erling Haaland. El implacable goleador noruego no para de triturar récords con el Borussia Dortmund y solo tiene 20 años. Estando en el Red Bull Salzburgo hubo una posibilidad de que el blaugrana lo contratase. No se dio.
"Porque me decían que no era un jugador del modelo Barça. Entiendo que Bartomeu haga caso de la secretaría técnica, pero la verdad es que podrían haber venido estos jugadores, que luego tampoco sabes qué rendimiento van a dar", relató el ex directivo.
Bordas, además, reveló que Kylian Mbappé, el jugador de más alta tasación en el mundo actualmente, fue descartado.
"Cuando estábamos para hacer el fichaje de (Ousmane) Dembélé me llamó Minguella para decirnos que Mbappé estaba a tiro. Yo hablé con Bartomeu y me dijo que lo mirase. Llamé a su padre y me dijo que no iba a ir al (Real) Madrid porque estaban Cristiano, Benzema y Bale y en cambio al Barça podía ir porque no estaba Neymar", afirmó Bordas.
"El presidente del Mónaco prefería que fuese al Barça para no reforzar al PSG, rival directo. Y por 100 millones se podría haber hecho. Pero Robert prefirió a Dembélé y lo apoyó Pep Segura. La explicación fue que Mbappé juega para él y Dembélé juega para el equipo. Y como se fue un extremo como Ney, Robert prefería más un extremo que a un finalizador", agregó.
Otro que pudo ser jugador del conjunto catalán fue Álvaro Morata. El delantero no quería seguir en Inglaterra por ese entonces. Acabó en el Atlético de Madrid.
"Yo pensaba en los últimos años que (Luis) Suárez necesitaba un relevo y no hay muchos que puedan serlo porque Luis es uno de los mejores. Uno bueno era (Álvaro) Morata que quería irse del Chelsea. Lo hablé con Bartomeu y me dijo que le gustaba mucho. Moví lo de Morata y la verdad es que fue posible traerlo cedido pero la secretaría técnica lo desestimó y vino Boateng", apuntó Bordas.