Era el gran partido de la fecha. Se enfrentaba el tricampeón Universidad Católica contra Palestino, uno de los cuadros de mejor pie en el torneo anterior. En San Carlos de Apoquindo, los cruzados demostraron por qué predominan sin contrapeso en el ámbito local. Si bien sufrieron innecesariamente sobre el final, fueron muy superiores en el juego y ganaron 2-1.
La UC lleva dos triunfos en dos encuentros. Su impresionante récord sigue creciendo. Ya son 54 fechas como líder del campeonato nacional. Los árabes, en cambio, acumulan su segunda derrota consecutiva y muchas dudas.
El inicio del partido fue parejo. Ambos salieron a proponer. En esa lucha, la Católica conectó el primer gran golpe. Penal de Vicente Fernández sobre Gastón Lezcano y Fernando Zampedri convirtió a los 27'.
Si bien Palestino adelantó las líneas, no tenía claridad para inquietar a Matías Dituro. El local, en cambio, tuvo dos ocasiones clarísimas para estirar su ventaja. Cristopher Toselli lo impidió.
Toselli se volvió a lucir en el arranque de la segunda mitad. Pero nada pudo hacer a los 49'. Tremenda jugada del central Tomás Asta-Buruaga, sacó el centro y Diego Valencia metió el cabezazo en la boca del arco.
Los dirigidos por José Luis Sierra no mostraban ideas para reaccionar y dejaban muchos espacios en el fondo. Cada vez que aceleraban, los precordilleranos inquietaban. Pero no liquidaron y los 81' Luis Jiménez anotó de penal tras una absurda mano de Valber Huerta.
Hubo angustia hasta el pitazo final. Palestino apretó y preocupó. Pero la Universidad Católica resistió, tal como lo hizo en Chillán. Otra vez mostró su chapa.
