Un Mundial de sorpresas. No cabe ninguna duda. Tras el descalabro de Argentina ante Arabia, ahora llegó otro batacazo que sacude a Qatar 2022.
Por el Grupo E, Japón perdía 1-0 con Alemania, pero en una ráfaga de buen fútbol lo dio vuelta para conseguir uno de los mejores -sino el mejor- triunfo en su historia.
Una tremenda victoria que cambia los papeles del catalogado "grupo de la muerte",
donde también están España y Costa Rica.
Pero lo que se vivió en el Estadio Internacional de Jalifa fue increíble. En el primer tiempo Alemania impuso condiciones. Lo comenzó ganando a través de Ilkay Gundogan de penal a los 33' y tuvo varias otras chances para aumentar la cuenta.
En el segundo lapso parecía que la tónica era la misma. De hecho, el portero Shuichi Gonda se convertía en figura tras atajar cuatro disparos en una misma jugada.
Pero ahí vino el punto de inflexión. El momento bisagra. Cuatro cambios seguidos que hizo el DT Hajime Moriyasu y todo se modificó. La historia llamaba a la puerta.
Ritsu Doan, uno de los ingresados, capturó un rebote tras un flojo rechazo del golero Manuel Neuer y a los
75' anotó el empate en un gol que sorprendía al mundo.
Pero para asombro de todos, no fue lo único. Los japoneses querían más y lo consiguieron a través de Takuma Asano, otro de los delanteros que entró en el complemento.
Asano, a los 83', tuvo una fenomenal corrida, se metió al área, y casi sin ángulo fusiló a Neuer y le rompió el arco. Espectacular.
En los minutos finales, Alemania se fue con todo a buscar el gol que le diera el empate, pero no estuvieron finos. Con su propio arquero en el área rival, intentaron e intentaron. Todo fue en vano.
Un batacazo que difícilmente los japoneses olvidarán. El Grupo E se pone infernal.